Descubre estrategias clave para salvaguardar tu retiro ante la subida de los precios y la inflación persistente, incluyendo aumentos en beneficios y opciones de inversión seguras.

Aunque esta cifra representa una disminución respecto al 41% de 2024, sigue siendo una de las principales preocupaciones, superando costos de vivienda y la falta de fondos.
Supuestamente, desde 1980, los precios han aumentado aproximadamente un 188% en términos generales, lo que significa que algo que costaba 1 euro en 1980 ahora cuesta cerca de 2,88 euros en 2025.
Si la #inflación se mantiene en torno al 3% anual, una tasa que ha sido promedio en las últimas décadas, el poder adquisitivo de una cartera de inversión puede reducirse a la mitad en aproximadamente 25 años.
Esto puede representar un riesgo serio para quienes planean una #jubilación que podría durar varias décadas.
Por ello, es fundamental adoptar medidas para proteger el capital y los ingresos durante la jubilación. Aquí presentamos algunas estrategias clave:
1. Mantén un fondo de emergencia
Es recomendable contar con un fondo de reserva que cubra al menos tres a seis meses de gastos básicos. Aunque aún estés trabajando, este fondo puede ser crucial en caso de gastos imprevistos, como reparaciones de vehículos o emergencias médicas, evitando así retirar fondos de tus #inversiones destinadas a la jubilación.
2. Incrementa tus metas de ahorro
Considera aumentar la cantidad que aspiras a ahorrar para tu jubilación. Si inicialmente pensabas en un millón de euros, tal vez deberías establecer un objetivo de 2 millones de euros, especialmente si planeas retirarte en 20 años.
Ahorros constantes y una inversión disciplinada pueden hacer realidad estas metas.
3. Retrasa la jubilación
Posponer la edad de retiro puede incrementar significativamente tus ahorros. Supuestamente, retrasar la jubilación en cinco años, continuando con el ahorro, puede elevar tu fondo de jubilación de aproximadamente 740.000 euros a más de 1.1 millones en 20 años, dependiendo de las tasas de interés y retorno de inversión.
4. Diversifica con dividendos
Invertir en acciones que pagan dividendos puede ser una estrategia eficaz. Las empresas sólidas suelen aumentar sus dividendos anualmente, ayudando a mantener el ritmo de la inflación. También puedes optar por fondos cotizados en bolsa (ETFs) centrados en dividendos, que simplifican la inversión.
Considera bonos ligados a la inflación
5. Considera bonos ligados a la inflación
Instrumentos como los bonos del Tesoro ligados a la inflación (supuestamente similares a los TIPS en EE.UU.) o los bonos I, ajustan sus intereses según la inflación, protegiendo así tu poder adquisitivo.
6. Invierte en bienes raíces
Los fondos de inversión en bienes raíces (REITs) son una opción para generar ingresos pasivos. Estas empresas, que poseen y gestionan propiedades, están obligadas a distribuir la mayor parte de sus ganancias en dividendos. ETFs especializados en REITs, como el Vanguard Real Estate ETF, pueden ser una opción inteligente.
7. Prefiere empresas con capacidad de subir precios
Al escoger acciones, busca compañías con marcas fuertes que puedan incrementar sus precios sin perder clientes.
Esto ayuda a las empresas a mantener márgenes y a los inversores a beneficiarse del aumento de ingresos.
8. Mantén inversiones seguras
Aunque en la jubilación es recomendable diversificar, también es prudente reservar algunos años de gastos en productos de bajo riesgo, como cuentas de ahorros de alta rentabilidad o certificados de depósito, especialmente en un entorno de tasas de interés altas, que actualmente superan el 4% en muchos países europeos.
9. Maximiza beneficios de la Seguridad Social
Supuestamente, en algunos países, retrasar la solicitud de la pensión puede aumentar considerablemente el monto mensual.
Por ejemplo, esperar hasta los 70 años puede incrementar los beneficios en un 32%, lo que en euros puede traducirse en unos 950 euros adicionales mensuales.
10. Diversifica tus fuentes de ingreso
Es recomendable contar con múltiples fuentes de ingreso en la jubilación, como pensiones, alquileres, dividendos y rentas de inversiones.
Esto reduce el riesgo de que la inflación afecte negativamente a todos los ingresos simultáneamente.