El Gobierno español autoriza financiación para incrementar las plazas del Grado en Medicina, buscando mejorar la formación de futuros profesionales de la salud.

En una reciente decisión del Consejo de Ministros, el Gobierno de España ha dado el visto bueno a un acuerdo que permitirá la financiación de un aumento de plazas en el Grado en Medicina en universidades públicas.

Esta medida está alineada con la necesidad de formar un mayor número de profesionales de la salud, dado el creciente déficit de médicos en el país.

El Real Decreto 696/2023, que fue promulgado el 25 de julio, ya había comenzado a establecer un marco para la concesión directa de subvenciones a las universidades con el objetivo de incrementar las plazas de Medicina y hacer inversiones en la calidad docente para el curso académico 2023-2024. Sin embargo, para continuar con dichos esfuerzos, el nuevo Real Decreto 874/2024, que fue aprobado el 3 de septiembre, tendrá efecto en el curso académico 2024-2025.

La financiación que se destinará para este proyecto ascenderá a 23.220.000 euros, que se distribuirán entre los años 2024 y 2025. Esta suma se utilizará para cubrir las subvenciones necesarias que permitan a las universidades públicas no solo aumentar, sino también mantener el número de plazas en el Grado en Medicina, asegurando así que haya un flujo constante de nuevos graduados que se integren en el sistema sanitario español.

Históricamente, el sistema de salud en España ha enfrentado retos significativos relacionados con la formación de médicos.

Según un informe publicado en marzo de 2021, se identificó una insuficiencia en el número de graduados de Medicina en comparación con las necesidades emergentes de diversas especialidades, destacando particularmente la Medicina Familiar y Comunitaria.

Este informe sugería un aumento en la capacidad de formación para adecuarse a la proyección de necesidades de atención médica en el horizonte 2021-2035.

La Dirección General de Ordenación Profesional del Ministerio de Sanidad fue la encargada de solicitar esta ampliación de fondos.

Su función principal es organizar la formación de los profesionales sanitarios en España, lo que incluye la regulación del acceso a los estudios que permiten el ejercicio médico.

La propuesta del Gobierno implica una visión a largo plazo por parte de la Administración, reconociendo la importancia de contar con un número adecuado de profesionales de la salud que puedan atender las demandas de una población en crecimiento y con una esperanza de vida que también ha aumentado.

La planificación y financiamiento de estas plazas no solo es relevante para el ámbito educativo, sino que también tiene un impacto directo en la calidad de atención sanitaria que los ciudadanos pueden recibir.

De este modo, se prevé que estas medidas contribuyan a revertir la escasez de especialistas en áreas críticas, garantizando que el sistema de salud pública en España pueda responder de manera efectiva a las necesidades de los pacientes.

La continuidad en la formación de futuros médicos es, por tanto, esencial no solo para la mejora de los niveles de salud de la población, sino también para asegurar que todos los ciudadanos tengan acceso a atención médica oportuna y de calidad.