Una empleada en Utah fue despedida tras referirse a un empleado transgénero según sus creencias religiosas, evidenciando una tensión creciente entre libertad religiosa y derechos de género en los Estados Unidos.

En marzo pasado, contrató a un hombre transgénero como asociado de ventas. Sin embargo, en su primer turno con este empleado, Boden afirmó que en dos ocasiones se refirió a él como “ella”, en línea con sus creencias religiosas, ya que es miembro de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, institución que supuestamente enseña que el género es una característica inmutable de la identidad eterna de una persona.
Este incidente, que presuntamente llevó a su despido, ha puesto en primer plano un creciente conflicto entre la libertad religiosa y los derechos de las personas transgénero y no binarias en el entorno laboral.
La polémica surge en un contexto donde, según datos históricos, la lucha por los derechos civiles en #EE.UU. ha estado marcada por tensiones similares, como la lucha por los derechos civiles en la década de 1960, que supuestamente también enfrentó a comunidades religiosas con movimientos por igualdad.
El caso de Boden no es un hecho aislado. Supuestamente, en otros estados del país se han reportado situaciones donde las creencias religiosas influyen en la forma en que los empleadores tratan a empleados transgénero, generando debates legales y sociales sobre cómo equilibrar la libertad de culto con los derechos de igualdad y no discriminación.
Por otro lado, la Oficina de Derechos Humanos en EE.UU. ha señalado que la protección contra la discriminación laboral basada en la identidad de género está respaldada por leyes federales, aunque algunos estados y empresas aún mantienen posturas más conservadoras, permitiendo a los empleadores tomar decisiones que supuestamente favorecen sus creencias religiosas.
Este incidente también ha llevado a que organizaciones defensoras de los derechos trans argumenten que la libertad religiosa no debe usarse como excusa para justificar la discriminación
Este incidente también ha llevado a que organizaciones defensoras de los derechos trans argumenten que la libertad religiosa no debe usarse como excusa para justificar la discriminación.
La discusión se intensifica en un momento donde la sociedad estadounidense continúa debatiendo la expansión de derechos y libertades, en un país donde la diversidad cultural y religiosa ha sido una característica distintiva desde su fundación.
Expertos en derecho laboral y derechos humanos han manifestado que casos como este podrían sentar precedentes importantes en la legislación laboral de EE.UU., y presuntamente, en otros países que enfrentan dilemas similares. La tensión entre respetar las convicciones religiosas y garantizar la igualdad de derechos para todos los empleados continúa siendo uno de los temas más delicados en la agenda social y legal a nivel mundial.
Mientras tanto, la comunidad trans y sus aliados llaman a una mayor sensibilización y protección en el ámbito laboral, en un esfuerzo por promover un entorno inclusivo y respetuoso, donde las creencias religiosas no sean utilizadas para justificar la discriminación.