Después de una caída ante Unión, Vélez tendrá que lidiar con la presión y una posible lesión en su plantel. El técnico Gustavo Quinteros habla sobre el impacto de estas circunstancias.

El pasado sábado marcó una jornada complicada para Vélez Sarsfield, ya que su derrota contra Unión no solo comprometió sus posibilidades en el torneo, sino que también se agregaron preocupaciones por la salud de sus jugadores.

Con una caída por 1-0, el equipo velezano se encuentra en una situación delicada, con la definición del campeonato extendiéndose hasta la última fecha, lo que ha aumentado la presión sobre el técnico Gustavo Quinteros y su plantilla.

Una de las principales preocupaciones tras este partido fue la salida de Valentín Gómez, quien tuvo que abandonar el campo con una molestia.

El entrenador Quinteros expresó al respecto: "Creemos que fue solo un golpe.

Valentín no quería salir, pero buscamos protegerlo para lo que viene". La salud de los jugadores se convierte en un tema crucial a medida que el torneo se acerca a su desenlace.

Quinteros también subrayó la falta que le hizo al equipo Thiago Fernández, quien es considerado un jugador clave para el engranaje ofensivo del Vélez.

"Tuvimos mucho la pelota, pero nos faltó un jugador desequilibrante como lo teníamos a Thiago.

No pudimos vulnerar a una defensa que estuvo bien organizada", afirmó el DT. Este comentario refleja la frustración en el vestuario por la falta de creatividad y efectividad en los últimos partidos.

El técnico expresó también su descontento por la programación de los partidos, que según él, ha perjudicado a su equipo.

"Nos perjudica jugar tantos partidos en pocos días.

No tienes tiempo para recuperar a los jugadores.

Hace poco tuvimos cuatro partidos en once días y ahora tres en ocho", comentó Quinteros, enfatizando la carga mental que representa para sus jugadores.

En la conferencia de prensa, el técnico no escatimó en criticar algunas decisiones arbitrales.

Durante el partido, Vélez solicitó un penal a favor después de una jugada polémica entre Pardo y Pizzini.

Quinteros, al respecto, indicó: "Estaba lejos, no la volví a ver.

Pareció que lo empujó de atrás.

Igual, las dudosas nunca fueron a favor de Vélez". Esta situación refleja una recurrente preocupación entre los hinchas del Fortín sobre el trato que recibieron los equipos en el arbitraje.

Cerrando la rueda de prensa, Quinteros se refirió a la final de la Copa Argentina que tendrán frente a Central Córdoba, que se disputará en el mismo estadio de Unión.

A pesar de que el equipo ya ha jugado en esa cancha, el entrenador no considera que haya ventaja: "Haber jugado ya en la cancha no nos da ninguna ventaja.

El rival va a estar enteros, frescos.

Si hay ventaja es esa".

En este contexto difícil, Vélez Sarsfield deberá encontrar la forma de recuperarse y afrontar los desafíos que vienen, tanto en términos de rendimiento en el campo de juego como en la salud de sus jugadores.

La afición espera que el equipo supere estas adversidades y se posicione favorablemente en las instancias finales del torneo.