El Abierto de Australia continúa su desarrollo con varias historias interesantes, especialmente el duelo esperado entre Novak Djokovic y Carlos Alcaraz que tendrá lugar el martes.

Sin embargo, este lunes, Jannik Sinner, el actual número uno del mundo, tuvo que lidiar con un desafiante encuentro contra Holger Rune, donde a pesar de atravesar momentos complicados, logró avanzar a los cuartos de final.

Sinner se enfrentó a Rune, quien ocupa la posición 13 en el ranking, en un partido que terminó 6-3, 3-6, 6-3 y 6-2 a su favor.

A pesar del resultado, Sinner no tuvo un camino fácil; la alta temperatura y las condiciones del juego lo llevaron a sufrir temblores preocupantes durante el partido.

"Tuve suerte de haber aprovechado la pausa que se tomó para reparar la red en el cuarto set", comentó Sinner al final, refiriéndose a un incidente que interrumpió el juego por aproximadamente 20 minutos, justo cuando Rune había tomado la delantera.

Este inesperado descanso le permitió al italiano recuperarse físicamente, lo cual considera clave para su éxito en el partido.

"La pausa fue beneficiosa.

Necesitaba enfriarme y tomar agua", explicó Sinner, quien también admitió haber enfrentado dificultades en la cancha.

A pesar de que físicamente no se encontraba al 100%, logró salir victorioso y está listo para su próximo reto.

La cita para el campeón defensor no será fácil, ya que se medirá contra el australiano Alex De Miñaur, actualmente en el octavo puesto del ranking, que fue contundente en su victoria contra Alex Michelsen.

Este encuentro marcará el décimo cuarto de final que Sinner disputa en torneos de Grand Slam, consolidándose como el segundo italiano en lograr esta hazaña después de Nicola Pietrangeli.

Mientras tanto, el resto de las mujeres en competencia sigue brillante, destacando a la polaca Iga Swiatek, que sigue mostrando un juego impresionante.

Swiatek se declaró lista para enfrentarse a Emma Navarro en busca de alcanzar las semifinales después de deshacerse fácilmente de Eva Lys con un contundente 6-0 y 6-1.

La jugadora polaca ha tenido un torneo notable, alcanzando los cuartos de final sin perder ningún set.

Además, había recibido buenas noticias, ya que la Agencia Mundial Antidopaje decidió no apelar la suspensión de un mes que le fue impuesta tras un caso de doping, aceptando su argumento de contaminación.

Esto permite a Swiatek concentrarse plenamente en su carrera por un sexto Grand Slam, el primero en Australia.

Por otro lado, el torneo vivió momentos difíciles, en especial para el carismático jugador francés Gael Monfils, quien a sus 38 años se vio forzado a abandonar su encuentro en los octavos de final por una lesión.

Monfils, que había llegado tras conseguir el título en Auckland, se despidió antes de lo esperado ante Ben Shelton, quien a pesar de ser más joven, hizo valer su posición en el ranking.

Así, el Abierto de Australia sigue adelante, con historias de superación y retos por delante, mientras los aficionados esperan ansiosos los próximos encuentros de este emocionante torneo.