La tenista bielorrusa Aryna Sabalenka logró una importante victoria el pasado jueves en Nueva York, al superar a la joven estadounidense Emma Navarro, asegurando su lugar en la final del US Open por segunda vez consecutiva.

En un partido que tuvo lugar ante una multitud de 20,000 espectadores, Sabalenka se impuso a Navarro, clasificada como la número 12 del torneo, con un marcador de 6-3 y 7-6 (7-2).

Por otra parte, la estadounidense Jessica Pegula se alzó como la rival de Sabalenka en la gran final, luego de vencer a la checa Karolina Muchova en la otra semifinal.

Pegula, ubicada en la sexta posición del ranking, se repuso de un inicio complicado y logró dar la vuelta al marcador, ganando el partido 1-6, 6-4 y 6-2 tras 2 horas y 12 minutos de intensa acción sobre la cancha dura de Nueva York.

La bielorrusa, que se ha consolidado como una de las grandes favoritas del torneo, expresó su desánimo hacia el público, quien el año pasado había apoyado a su rival en la final, Coco Gauff.

"Ahora me aplauden.

Wow.

Es un poco tarde", comentó Sabalenka con ironía.

A pesar de la presión, la bielorrusa mantuvo su compostura y logró cerrar el segundo set incluso después de haberse enfrentado a una fuerte resistencia de Navarro, quien mostró su mejor versión durante el torneo.

Navarro, de solo 23 años, ha tenido un desempeño excepcional, enfrentando y eliminando a figuras destacadas del tenis, incluyendo a la propia Gauff.

"Fue una experiencia increíble jugar en la pista central Arthur Ashe contra una rival como Sabalenka", afirmó. A pesar de su talento y determinación, la falta de recursos en el momento crucial del partido le impidió extender su camino al tercer set.

"Es decepcionante no haber podido ganar hoy, especialmente cuando sentía que estaba en control al final del segundo set", añadió Navarro, quien, con esta actuación, entra por primera vez en el top-10 del ranking mundial.

Con una estatura notable de 1.82 metros, Sabalenka utilizó su imponente derecha, logrando 34 golpes ganadores frente a 13 de Navarro, lo que fue crucial para obtener su victoria.

Esta afirmación de su capacidad en las pistas duras reafirma su potencial para conquistar el US Open, un trofeo que se sumaría a sus dos títulos de Grand Slam previos, logrados en el Abierto de Australia en 2023 y 2024.

El torneo también ha traído esperanza a los aficionados estadounidenses, ya que por primera vez desde 2006, el país tiene garantizado un finalista masculino, tras la semifinal que se disputará entre Taylor Fritz y Frances Tiafoe.

Las expectativas estaban altas, ya que el público anhelaba ver una final femenina completamente estadounidense desde 2017, pero será Pegula, hija del magnate Terry Pegula, la única representante en la final, rompiendo así su racha de frustraciones en las etapas finales de los Grand Slam, donde había caído en seis ocasiones previas.