La jugadora estadounidense Peyton Stearns, actual número 42 del mundo, logró una victoria memorable sobre Naomi Osaka en el WTA 1.000 de Roma, pasando a los cuartos de final tras una durísima batalla de tres sets que finalizó en tie-break. La ganadora del partido evidenció un esfuerzo heroico, enfrentándose a condiciones físicas adversas y calor extremo en el Foro Itálico.

Naomi Osaka, ex número 1 del mundo y campeona en Saint Malo, llegaba al evento italiano con confianza tras sus triunfos iniciales en la capital italiana.
Sin embargo, se topó con una Stearns que, pese a su lesión y agotamiento, mostró una determinación admirable para seguir peleando. En el primer set, la estadounidense logró imponerse en un marcador de 6-4, pero Osaka no se rindió y conquistó el segundo con un 6-3. La tensión se palpaba en el ambiente, especialmente tras un agotador tercer set lleno de alternancias y golpes de gran intensidad.
Durante ese set decisivo, Stearns tuvo que tirar de todos sus recursos físicos y mentales para mantenerse con vida en el partido. En un momento dado, perdió su saque y Osaka trató de aprovechar la oportunidad para cerrar el encuentro. Sin embargo, la estadounidense logró remontar, rompiendo el servicio de su oponente en dos ocasiones consecutivas y llevando el partido al tie-break, que fue crucial para definir la victoria.
Sellando su clasificación a los cuartos de final
En ese desempate, Stearns, exhausta, logró mantener la calma y ganar cinco puntos consecutivos, sellando su clasificación a los cuartos de final.
El esfuerzo de #Peyton Stearns tras el partido fue visible, y admitió en rueda de prensa que en el tie-break solo pensaba en no vomitar en la cancha.