El serbio avanza en Melbourne Park, superando a Roger Federer en partidos disputados en Grand Slam y buscando su 25° título major.

Novak Djokovic sigue escribiendo su nombre en la historia del tenis mundial con cada encuentro que disputa.

En su reciente victoria contra el portugués Jaime Faria, actual número 125 del ranking, el serbio mostró su destreza y experiencia al ganar 6-1, 6-7 (4), 6-3 y 6-2, culminando un partido que duró exactamente tres horas.

Esta victoria no solo le permitió avanzar a la tercera ronda del Abierto de Australia, sino que también le otorgó el reconocimiento como el tenista con más partidos disputados en la historia de los torneos de Grand Slam, superando a la leyenda suiza Roger Federer, quien ostentaba el récord con 429 enfrentamientos.

Ahora, Djokovic se encuentra en solitario en esta lista, cerca de alcanzar la notable marca de 150 triunfos en este tipo de torneos tras cumplir los 30 años, empatando en este aspecto con la menor de las Williams, un testimonio de su longevidad en el deporte.

El serbio, que a sus 37 años continúa compitiendo al más alto nivel, mencionó en sus redes sociales: "Fue una batalla hoy.

Gracias, Melbourne, por la energía y bien jugado, Jaime Faria, que seguramente tiene un futuro brillante por delante.

Me siento bendecido por haber batido otro récord en Grand Slam.

Amo este deporte". Con esta victoria, Djokovic amplía su impresionante récord en el Abierto de Australia, donde ha logrado 96 triunfos en 105 partidos, lo que se traduce en una efectividad superior al 91%. Su objetivo es alcanzar el récord de 102 victorias en el torneo que aún pertenece a Federer.

El próximo desafío para Djokovic será enfrentarse al checo Tomas Machac, actual número 25 del mundo, quien llega a este partido tras una dura batalla que lo vio ganar contra Reilly Opelka después de cinco sets muy competitivos.

Los antecedentes de enfrentamientos entre ambos son igualados, pero el serbio es conocido por su capacidad de elevar su nivel en los torneos de Grand Slam.

Más adelante, Djokovic podría encontrarse con otro jugador checo, Jiri Lehecka, o el francés Benjamin Bonzi en la siguiente ronda.

El año pasado, Djokovic se coronó una vez más en el Abierto de Australia, lo que le añadió a su colección de títulos, que incluye diez victorias en este prestigioso torneo.

Esta hazaña no solo destaca su tenacidad, sino también su adaptabilidad y habilidad para funcionar bajo presión.

Para muchos, la longevidad y el éxito de Djokovic en el tenis moderno son ejemplos de dedicación, disciplina y amor por el deporte.

En la conferencia de prensa posterior a su partido, Djokovic también mencionó su reciente colaboración con Andy Murray.

Después de enfrentarse 36 veces en el circuito, la dupla ahora trabaja junta para analizar tácticas y mejorar en el juego.

"Es impresionante lo trabajador que es Andy, la dedicación que tiene es admirable", dijo Djokovic.

Esta unión, con miras a los Juegos Olímpicos de París 2024, refleja el compromiso de Djokovic por seguir compitiendo y manteniendo su nivel de excelencia.

Con grandes planes para el futuro y un deseo inquebrantable de seguir ganando, Djokovic ha dejado claro que los aficionados aún tienen mucho por ver de él en los próximos años.