El serbio Novak Djokovic, tras un prometedor inicio de torneo, fue eliminado del Abierto de Estados Unidos por el australiano Alexei Popyrin en una inesperada derrota.
Una de las sorpresas más notables del Abierto de Estados Unidos se produjo en la madrugada de este sábado, cuando el serbio Novak Djokovic, una de las grandes figuras del tenis actual, fue eliminado por el australiano Alexei Popyrin en la tercera ronda del torneo.
Este resultado ha dejado a los aficionados en estado de shock, especialmente después de la reciente salida del español Carlos Alcaraz, otro de los favoritos para llevarse el título.
La eliminación de Djokovic, quien había llegado al torneo con un notable impulso tras haber conseguido el oro olímpico en los Juegos de París 2024, se dio en un enfrentamiento que duró 3 horas y 19 minutos y finalizó con un marcador de 6-4, 6-4, 2-6 y 6-4. Popyrin, colocado en la posición 28 del ranking mundial, mostró una gran tenacidad y habilidades en la cancha, lo que le permitió dejar fuera de la competencia al ex número uno del mundo.
Djokovic ha sido considerado durante muchos años como uno de los mejores tenistas de todos los tiempos, con un impresionante legado que incluye 24 títulos de Grand Slam, lo que lo convierte en el máximo ganador en la historia de estos torneos.
Sin embargo, este año ha sido complicado para él, ya que había enfrentado desafíos tanto dentro como fuera de la cancha, incluidas lesiones y cuestiones relacionadas con su estatus de vacunación.
El partido de este sábado no solo marcó una notable victoria para Popyrin, sino que también representó un momento significativo en la carrera de Djokovic, quien aspira a convertirse en el primer jugador en lograr 25 títulos de Grand Slam.
Este objetivo, que parecía alcanzable al comenzar el torneo, ahora está fuera de su alcance y deja abierta la pregunta sobre su futuro en el circuito profesional.
Mientras tanto, Popyrin ha demostrado que el tenis australiano sigue dando grandes jugadores, recordando a figuras como Lleyton Hewitt y Pat Rafter, que también han tenido un impacto considerable en el deporte.
Esta victoria ante Djokovic podría ser un hito en su carrera, dándole la confianza necesaria para avanzar en el torneo y enfrentarse a nuevos desafíos.
El Abierto de Estados Unidos ha sido conocido históricamente por sus sorpresas y esta edición no es la excepción.
La caída de dos de los principales favoritos en la misma semana plantea un panorama interesante y abierto para el resto del torneo.
Los aficionados podrán ver con atención cómo Popyrin se enfrenta a sus próximos rivales y si podrá aprovechar el impulso que le ha dado esta victoria monumental.
Con este giro inesperado, el torneo promete seguir brindando emociones y resultados sorprendentes en los encuentros que están por venir.