El tenista Jannik Sinner es declarado inocente tras un positivo por clostebol, mientras celebra el título en Cincinnati y su ascenso en el ranking.
El tenista italiano Jannik Sinner se encuentra en el centro de la controversia tras haber dado positivo en controles antidopaje, aunque recibió el respaldo de la Agencia Internacional de Integridad del Tenis (ITIA) al ser declarado inocente.
Según el portavoz de Sinner, el jugador padece de dermatitis psoriasiforme, una enfermedad dermatológica que afecta su piel, lo que ha generado críticas posteriores a su positivo por clostebol, una sustancia prohibida.
El caso se remonta a abril, cuando Sinner fue sometido a controles en el torneo de Indian Wells, donde se registró un positivo.
Después de una exhaustiva investigación, el atleta fue exonerado el pasado martes cuando se estableció que los resultados fueron el resultado de una "contaminación involuntaria". Según el equipo de Sinner, durante el tratamiento para una herida en su dedo, su fisioterapeuta utilizó un producto de venta libre que contenía clostebol en cantidades mínimas, inferior a una milmillonésima parte de un gramo.
Este inconveniente surgió en un momento crucial de la carrera de Sinner, quien había comenzado el año con una notable victoria al consagrarse campeón del Abierto de Australia, su primer Grand Slam, y ascendiendo a lo más alto del ranking.
En el pasado mes, con su reciente título en el Masters 1000 de Cincinnati, logró sumar su quinto trofeo del año, destacando esta temporada como la más exitosa hasta ahora en su carrera profesional.
Ante el revuelo generado, el propio Sinner decidió devolver el premio en metálico que había conseguido en Indian Wells, equivalente a 225,000 euros, y renunció a los 400 puntos ATP que logró en dicho torneo, donde alcanzó las semifinales.
A pesar de las críticas y el escepticismo de algunos colegas, Sinner se mantiene firme en su compromiso con las normas antidopaje y su equipo sostiene que el uso del producto fue un error involuntario.
El australiano Nick Kyrgios, por su parte, criticó la absolución de Sinner, sugiriendo que debería haber enfrentado una suspensión de dos años.
A lo largo del año, Sinner ha experimentado un recorrido lleno de altibajos.
Después de su victoria en el Open de Australia, le siguieron lesiones que lo marginaron de importantes torneos, como el Masters 1000 de Roma y los Juegos Olímpicos de París.
A pesar de estos contratiempos, ha sabido recuperarse y volvió al circuito con fuerza, logrando triunfos significativos en Miami y Halle.
Con la vista puesta en el US Open, Sinner se siente optimista después de su victoria en Cincinnati, pero aún debe lidiar con la controversia de su positivo.
"He tenido muchos altibajos esta semana.
Espero llegar listo y recuperado al US Open", declaró el tenista tras su reciente éxito.
También recibió felicitaciones de la presidenta del Consejo de Ministros de Italia, Giorgia Meloni, quien destacó su logro como un hito para el tenis italiano.
Este episodio no solo ha puesto a prueba su carácter, sino que también ha resaltado la importancia de prestar atención a lo que los deportistas utilizan en su recuperación y tratamiento.
A medida que se aproxima el US Open, los ojos del mundo del tenis estarán clavados en Sinner, quien busca no solo mantener su estatus como número uno, sino también demostrar su competencia dentro y fuera de la cancha.