Sven-Göran Eriksson, exentrenador sueco de renombre, ha compartido unas conmovedoras reflexiones acerca de su vida y su cercano desenlace tras ser diagnosticado con un cáncer de páncreas terminal.

En una entrevista para un documental que será estrenado el próximo viernes en Amazon Prime Video, Eriksson expresó que considera haber llevado una "buena vida" y desea ser recordado como "un buen hombre". Su mensaje es claro y emotivo: prefiere que, cuando llegue su momento, sus seres queridos sonrían en lugar de lamentarse.

"Todos tememos el día de nuestra muerte, pero hay que aprender a aceptarla como parte de la vida", afirmó Eriksson durante la charla.

Con 76 años, el reconocido técnico habló desde su hogar en Sunne, Suecia, donde reside junto a su pareja, Yaniseth Bravo.

Esta vivienda, ubicada junto al lago Övre Fryken, ha sido considerada por Eriksson como el lugar idóneo para sus restos.

"Siempre pensé que aquí sería un buen lugar para descansar eternamente.

Se siente como hogar", comentó, mostrando una sorprendente serenidad al hablar de su inminente final.

Además de reflexionar sobre su legado, el exentrenador se mostró agradecido con aquellos que han estado a lo largo de su carrera, incluyendo jugadores, colegas y aficionados, y dejó un mensaje conmovedor: "Gracias por todo, entrenadores, jugadores, público, fue genial.

Cuídense y cuiden su vida.

Y vívanla.

Adiós".

Eriksson es recordado por su trayectoria al frente de diversos clubes importantes, así como por su papel como el primer entrenador extranjero del seleccionado inglés, con el que llegó a cuartos de final en dos Copas Mundiales (2002 y 2006). Durante su carrera, dirigió a equipos como el Benfica, Roma y Manchester City, además de tener a su cargo las selecciones de México y Costa de Marfil.

Durante los últimos meses, el extécnico ha sido homenajeado en diversas ceremonias, incluido un tributo en la 25ª Gala del Deporte en Suecia.

Pese a que en enero había anunciado que ya no aparecería en público debido a sus problemas de salud, Eriksson fue homenajeado en eventos organizados por el Liverpool y el Benfica, equipos que tuvieron un impacto significativo en su carrera.

Desde sus inicios en el fútbol, Eriksson ha sido un personaje emblemático, comenzando como defensa y posteriormente convirtiéndose en un entrenador respetado a nivel mundial.

Nacido el 5 de febrero de 1948, su carrera comenzó en 1977 con el Degerfors IF, y rápidamente se destacó como un estratega astuto, ganándose la admiración de jugadores y aficionados por igual.

La vida de Sven-Göran Eriksson ha estado marcada por su capacidad para desafiAR las expectativas.

Con su enfoque positivo hacia la adversidad y su deseo de ser recordado con cariño, deja un legado que trasciende el ámbito deportivo, invitando a todos a vivir con plenitud y alegría.