Se desplegó un gran operativo de seguridad en la previa del Superclásico entre River y Boca en Córdoba, con requisas a los micros de ambas hinchadas y la incautación de elementos peligrosos. Además, se implementarán estrictos controles para garantizar la tranquilidad durante el partido.
Las imágenes captadas en los accesos a la Provincia de Córdoba han causado gran preocupación en la previa del Superclásico de este domingo entre River y Boca.
Durante las requisas a los micros de ambas hinchadas, se encontraron cuchillos, tijeras, cadenas y una gran cantidad de alcohol.
Marcelo Frossasco, presidente del Consejo de Seguridad deportiva de Córdoba, expresó su deseo de que el partido sea una fiesta y destacó la importancia del fervor de la afición, recordando que es un encuentro entre adversarios, no enemigos.
En total, se controlaron 92 colectivos y se revisaron las pertenencias de aproximadamente 4500 simpatizantes.
La Policía informó que se han incautado elementos peligrosos tanto en la ruta como en los accesos al estadio, como parte de los controles habituales previstos.
A tres horas del inicio del partido, se abrirán las puertas del Estadio Mario Alberto Kempes para permitir el ingreso del público a las tribunas.
Para garantizar la seguridad durante el Superclásico, se desplegó un megaoperativo con la participación de 1.800 efectivos de distintas fuerzas de seguridad.
Se implementarán estrictos controles de admisión y se solicitará el DNI físico para el acceso al estadio.
Asimismo, se coordinó un operativo para los traslados de las barras bravas, con acciones planificadas entre las fuerzas de seguridad intervinientes.
La presencia de las barras bravas de ambos clubes genera preocupación, pero se informó que aquellos con derecho de admisión no podrán ingresar al estadio.
Los operativos de seguridad se mantendrán activos en todos los portones de ingreso y en los retenes dispuestos en diferentes puntos de acceso a Córdoba.
En una diferencia significativa, la barra de Boca cuenta con la autorización para ingresar al estadio, mientras que la cúpula de Los Borrachos del Tablón de River está impedida de hacerlo.
A pesar de ello, se realizan controles exhaustivos para evitar incidentes durante el evento deportivo más importante del fútbol argentino.
Con la implementación de medidas preventivas y un fuerte despliegue de seguridad, se espera que el Superclásico se desarrolle con normalidad y que los hinchas puedan disfrutar de un partido emocionante en el Estadio Kempes, con capacidad para 57 mil personas.
Toda la organización y planificación del operativo tienen como objetivo principal garantizar la tranquilidad y el orden durante el encuentro entre River Plate y Boca Juniors en Córdoba.