El club San Lorenzo lidia con problemas económicos y la reciente desvinculación de su jugador Francisco Fydriszewski en medio de una creciente crisis interna.
A pocas horas de disputar el último clásico del año, el ambiente en San Lorenzo es todo menos ideal.
El club, que atraviesa una profunda crisis interna, intenta salir a flote en medio de serios problemas económicos que afectan a su plantel.
El presidente Marcelo Moretti ha logrado extender el plazo para abordar los atrasos salariales que se han acumulado con diversos jugadores, pero toda la situación se ha vuelto insostenible.
En este contexto, Francisco Fydriszewski, un delantero que había sido considerado en los planes de Miguel Angel Russo, ha decidido dar un paso al costado.
A partir de este martes, Fydriszewski comenzó a faltar a los entrenamientos en señal de protesta por las deudas que el club tiene con él.
En busca de resolver su situación, se ha puesto en contacto con Futbolistas Argentinos Agremiados para recibir asesoría en su camino hacia la libertad contractual.
En una mañana de miércoles, finalmente se concretó su desvinculación de San Lorenzo de manera amistosa.
Fydriszewski logró llegar a un acuerdo que le permitirá cobrar lo que le corresponde.
Este atacante había llegado al club a principios de año bajo la dirección de Moretti, viniendo de una complicada situación con Barcelona de Ecuador, un conflicto que sigue vigente y que ha llevado a dicho club a presentar un reclamo formal ante FIFA.
En su paso por San Lorenzo, Fydriszewski mostró un rendimiento limitado, acumulando apenas 91 minutos de juego a través de cuatro partidos como suplente.
Su paso por el club se marcó, entre otras cosas, por un penal fallado que se convirtió en un símbolo de la frustración general del plantel y la afición.
Desde ese momento, el jugador se ganó el desprecio de los hinchas, quien no perdonaron su bajo rendimiento.
A pesar de estos tropiezos, el DT Russo aún creía en su potencial y lo tenía en mente para futuras convocatorias.
En medio de la tumultuosa situación, el presidente Moretti busca también avanzar en negociaciones con Sebastián Blanco, un jugador que ha recurrido a Agremiados por los mismos motivos de cobro, aunque en su caso continuará en el equipo hasta que se cumpla su contrato, que finaliza el 31 de diciembre.
El problema de los retrasos salariales ha llevado a que el club acumule una dura deuda con varios jugadores.
Moretti ha solicitado una semana extra para intentar conseguir los fondos necesarios y saldar las cuentas, lo que ha dejado en suspenso la resolución de esta problemática.
Todo esto se suma a un panorama que todavía se encuentra en desarrollo y que deja en el aire el futuro inmediato de San Lorenzo y su plantilla de jugadores en un año en el que, además, la presión de los aficionados y la historia del club se sienten cada vez más fuertes.