La situación en San Lorenzo se vuelve crítica después de la suspensión de su presidente Marcelo Moretti, quien enfrenta graves acusaciones en un escándalo de corrupción.

El club San Lorenzo atraviesa una de las etapas más complicadas de su historia reciente, marcada por un escándalo que involucra a su presidente, Marcelo Moretti.
El directivo se ha visto obligado a solicitar una licencia indefinida tras la difusión de un video donde aparece aceptando un paquete de dinero, lo que ha generado un gran revuelo en el fútbol argentino y más allá de sus fronteras.
Fue en este contexto que Moretti, en un intento por esclarecer su situación, presentó una "auto-denuncia" ante la justicia, indicando que hay un complot destinado a desacreditarlo.
Las imágenes que provocaron este alboroto fueron emitidas por Canal 9 y fueron grabadas en marzo del año anterior. En dicho video, la ex funcionaria de La Plata, María José Scottini, se encuentra con Moretti en su oficina y le entrega lo que, supuestamente, son 25.000 dólares. Este acto ha sido calificado por ella como una "donación"; sin embargo, tanto la comunidad futbolística como la tecnología de hoy han sembrado la sospecha de que puede haber algo más oscuro detrás de este intercambio.
La justificación de la entrega del dinero ha dejado al descubierto numerosas interrogantes: ¿por qué estos hechos permanecieron ocultos tanto tiempo?
Asimismo, se han presentado más denuncias relacionadas al asunto, lo que complica aún más la situación de Moretti.
Directivos rivales, incluido César Francis, han llevado el caso a la justicia, sumando presión al directivo de San Lorenzo. A medida que avanza la investigación, la incertidumbre crece en torno a la validez de las prácticas de Moretti y si se le permitirá continuar en el cargo una vez que todo salga a la luz.
El escándalo ha desatado un cisma en la comunidad del club, con llamados a su renuncia por parte de los opositores.
Problemas en la defensa de San Lorenzo antes del partido en la Copa Sudamericana
El entrenador Ruben Darío Insua se enfrenta a dificultades en la defensa de San Lorenzo antes del partido de la Copa Sudamericana contra Independiente de Medellín. El defensor Jonathan Galván, cuya llegada esperaban con ansias, no podrá jugar debido a problemas en su desvinculación de Racing.En medio del caos, Moretti ha declarado que se encuentra siendo objeto de extorsión, haciendo alusión a quienes han intentado chantajearlo con la difusión del material grabado.
Se menciona que, en su denuncia, también ha señalado que tiene en su posesión el video completo, sugiriendo que fue víctima de circunstancias diseñadas para perjudicarlo.
Es de destacar que este tipo de situaciones no son nuevas en el ámbito del fútbol argentino; en el pasado, otros clubes han experimentado crisis similares, lo que plantea el dilema constante sobre la ética en la administración de los equipos.
Mientras tanto, la directiva del club se encuentra en una situación delicada. Néstor Navarro, actual vicepresidente, asumirá el rol de presidente interino, mientras se evalúa el futuro de Moretti. Por otro lado, Claudio "Chiqui" Tapia, presidente de la AFA, ha expresado su apoyo a Moretti, generando aún más divisiones dentro del propio club. Las palabras de Moretti sobre el respaldo que está recibiendo generan dudas entre sus seguidores, ya que muchos dentro de los pasillos del club no perciben este supuesta solidez.
La indignación también ha resonado entre los aficionados, quienes se han manifestado en las puertas del club exigiendo claridad sobre lo acontecido.
Lo que está claro es que San Lorenzo enfrenta un importante desafío interno y su futuro dependerá de cómo manejen esta crisis, tanto los responsables actuales como las voces críticas que piden un cambio en la dirección del club.
La situación actual podría ser una oportunidad para evaluar y modificar prácticas dentro de la institución, transformando este escándalo en un punto de inflexión que pueda llevar a un futuro más transparente y con un enfoque renovado en la ética deportiva.