La campaña interna en San Lorenzo por la elección de un nuevo presidente se complica debido a desacuerdos con la AFA y la situación de Marcelo Moretti, generando incertidumbre en la dirigencia del club.

La disputa por el liderazgo en San Lorenzo ha llegado a un punto álgido tras la serie de conflictos internos y externalidades que afectan la gestión del club.
La situación se agrava en medio de tensiones con la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y las decisiones tomadas por la Comisión Directiva en torno a la elección de un nuevo presidente.
El actual escenario se vio complicado tras la controversia en torno a Marcelo Moretti, quien actualmente se encuentra en licencia y enfrenta una denuncia por presunta corrupción.
La denuncia señala que Moretti recibió aproximadamente 23.500 euros (equivalente a 25 mil dólares) en sobornos para facilitar la incorporación de un juvenil en las divisiones inferiores del club. Este hecho ha generado un revuelo interno y una serie de reacciones tanto en la dirigencia de San Lorenzo como en la AFA.
Recientemente, en la dirigencia del club surgieron diversos nombres para ocupar la presidencia en reemplazo de Moretti, entre los cuales destacó la candidatura de Julio Lopardo, quien en el pasado fue vicepresidente y dirigente destacado del club.
Sin embargo, la aceptación de Lopardo en los ámbitos de poder del fútbol argentino no fue bien vista por Claudio Tapia, presidente de la AFA, quien rápidamente manifestó su rechazo a la posible designación.
Tapia comunicó que no aprueba la candidatura de Lopardo y convocó a una reunión de urgencia con la Comisión Directiva de San Lorenzo para aclarar la situación.
Sin embargo, este encuentro fue cancelado abruptamente tras filtraciones a los medios que enfurecieron al presidente de la AFA, quien consideró que la reunión había sido comprometida por la filtración de información confidencial.
Por su parte, la dirigencia de San Lorenzo no ha cesado en sus esfuerzos por resolver la situación. Se conoció que, además de Lopardo, otros candidatos han sido considerados, aunque la falta de consenso ha dificultado la toma de decisiones. Entre las opciones que parecen tener mayor respaldo, se encuentra la figura de Leandro Goroyesky, actual tesorero del club y político con influencia en el partido de Escobar.
Problemas en la defensa de San Lorenzo antes del partido en la Copa Sudamericana
El entrenador Ruben Darío Insua se enfrenta a dificultades en la defensa de San Lorenzo antes del partido de la Copa Sudamericana contra Independiente de Medellín. El defensor Jonathan Galván, cuya llegada esperaban con ansias, no podrá jugar debido a problemas en su desvinculación de Racing.Goroyesky, quien además es profesor universitario, ha visto cómo su nombre sube en la lista de posibles candidatos a raíz de su perfil bajo y su cercanía con los sectores del club.
No obstante, también hay oposición interna. Uriel Barros, actual prosecretario del club y uno de los fundadores de la agrupación que apoyó inicialmente a Marcelo Moretti, ha declinado la posibilidad de asumir la presidencia por cuestiones personales.
Esto ha dejado más incertidumbre en la dirigencia, que busca rápidamente una solución ante la presión de los hinchas y los medios.
Mientras tanto, en medio de la disputa, algunos miembros del club han optado por colaborar con la justicia ante las denuncias en curso. Goroyesky y el secretario general, Martín Cigna, se presentaron voluntariamente ante la Fiscalía Porteña para ofrecer toda la información relacionada con las acusaciones contra Moretti, mostrando la voluntad del club por esclarecer los hechos.
En el plano institucional, la reunión de Comisión Directiva prevista para este jueves fue postergada, en un intento de evitar mayores conflictos y de dar tiempo a las negociaciones.
La cúpula del club espera que en los próximos días puedan llevarse a cabo las gestiones necesarias para definir quién será el nuevo presidente y estabilizar la situación institucional.
El conflicto en San Lorenzo refleja la complejidad del fútbol argentino, donde las intrigas políticas, las denuncias de corrupción y las disputas internas afectan tanto el día a día de los clubes como el bienestar de sus hinchas.
La resolución de esta crisis será crucial para que la institución pueda retomar su camino sin divisiones y con una dirigencia transparenteque inspire confianza en su afición y en el fútbol nacional.