Las renovaciones en el Rugby Championship buscan equilibrar la competencia y promover un juego más justo. Las nuevas reglas entran en vigor en 2024.

Imagen relacionada de modificaciones rugby championship 2024

Este sábado, con el inicio de la edición 2024 del Rugby Championship, que enfrentará a Los Pumas contra Nueva Zelanda, se implementarán importantes modificaciones en las reglas del juego.

La World Rugby, encargada de supervisar las competencias internacionales de rugby, ha decidido introducir una serie de cambios que buscan una mayor uniformidad y dinamismo en las competiciones que organiza.

Entre estas novedades, destaca la posibilidad de que un equipo pueda reemplazar a un jugador expulsado 20 minutos después de la sanción original, una norma que ya se había aplicado en el torneo de Super Rugby.

El objetivo principal de esta medida es evitar una desventaja excesiva para el equipo afectado por la expulsión, garantizando así un juego más fluido y justo.

Según un comunicado emitido por Sanzaar, la organización que integra a las federaciones de Nueva Zelanda, Sudáfrica, Australia y Argentina, "buscamos equilibrar el castigo" y mantener la emoción en el juego.

Así, aunque un jugador expulsado no podrá regresar al partido, el equipo podrá contar con un sustituto en el transcurso del encuentro, lo que contrarrestará el impacto inmediato de la expulsión.

No obstante, esta nueva norma tiene sus limitaciones.

En casos de expulsiones por infracciones graves, como un tackle peligroso, la regla no será aplicable.

En tales circunstancias, el equipo que pierde a un jugador deberá lidiar con la reducción numérica en el campo durante el resto del partido.

Otro aspecto significativo a tener en cuenta es la introducción de la regla del 'bunker', que hizo su debut en el Mundial de Francia 2023. Esta regla permite que un árbitro revise la decisión de mostrar una tarjeta amarilla a un jugador mientras este se encuentra en el banquillo de penalizaciones.


El TMO, o árbitro asistente de vídeo, contará con 10 minutos para analizar la situación y, si lo considera necesario, llamar al árbitro para evaluar la expulsión del jugador según la gravedad de la infracción.

Esto representa un avance importante en nuestro esfuerzo por asegurar que se tomen decisiones justas durante los partidos.

Además de estas innovaciones, se aplicarán nuevas restricciones que afectarán la dinámica del juego.

Por ejemplo, no se permitirá jugar un scrum a partir de un tiro libre, obligando a que estos se ejecuten de manera directa.

Asimismo, las acciones que impliquen desestabilizar a un jugador de pie en situaciones de tackle serán sancionadas con penalizaciones, todo en pro de una mayor fluidez del encuentro.

La implementación de estas reglas será acompañada de sanciones claras.

Por ejemplo, un jugador que reciba una suspensión por juego sucio deberá cumplir automáticamente con dos semanas de castigo, mientras que un tackle imprudente podría acarrear una suspensión de hasta un mes.

Con estas modificaciones, el Rugby Championship 2024 busca no solo adaptarse a las demandas del juego contemporáneo, sino también mejorar la experiencia tanto para los jugadores como para los aficionados, asegurando una competición más justa y emocionante.