River Plate se encuentra en una situación complicada a medida que se aproxima el crucial partido de vuelta contra el Atlético Mineiro en la Copa Libertadores.

Desde el retorno de Marcelo Gallardo al banquillo, el equipo ha anotado solo 8 goles en 10 partidos en la Liga Profesional, lo que genera preocupación entre los aficionados y el cuerpo técnico.

En su último encuentro ante Defensa y Justicia, River dejó muchas dudas respecto a su capacidad para marcar goles y deberá cambiar radicalmente su desempeño si desea obtener una remontada ante Mineiro, un rival que ya les ha puesto las cosas difíciles.

Gallardo ha enfatizado la necesidad de convertir al menos tres goles en el próximo partido para mantener vivas sus esperanzas de avanzar en el torneo continental.

"Soy consciente de que debemos hacer esos goles y, sin embargo, no lo estamos logrando.

Es preocupante, especialmente porque antes de mi llegada, Borja lideraba la tabla de goleadores y ahora no ha podido marcar", declaró el director técnico.

A pesar de estas dificultades, se muestra optimista y añadió: "No soy pesimista; al contrario, tengo motivos para sentir esperanza, aunque todos sabemos que la tarea no será fácil".

La afición de River Plate busca aferrarse a este optimismo, aunque el equipo, a pesar de contar con varios jugadores alternativos, no ha podido capitalizar sus oportunidades.

Gallardo, fiel a su estilo, entiende que el optimismo sin acciones concretas no será suficiente.

"Necesitamos abordar este partido con claridad y determinación, jugando con intensidad y tomando decisiones efectivas en los momentos críticos.

Lo que nos falta es un gol que encienda la pasión del equipo y de la hinchada", añadió.

El compromiso de Gallardo es preparar al equipo no solo físicamente, sino mentalmente, para inculcarles la creencia de que lo extraordinario es alcanzable.

La preparación del plantel estará condicionada por el estado físico de los jugadores y las estrategias que considere necesarias para cambiar la serie en favor de River.

Aunque el tiempo corre en su contra, el técnico ha transmitido al equipo que tanto en el fútbol como en la vida se enfrentan retos y que la resiliencia es clave: "Debemos levantarnos y seguir luchando hasta el final", aseguró.

La afición riverplatense espera que sus jugadores puedan retribuirles en la cancha, especialmente en un partido que se prevé intenso y con un estadio lleno de energía.

Además, el regreso de figuras como el Pity Martínez ha generado un aire fresco en la plantilla.

Gallardo también mencionó que está revisando la situación de Acuña, mientras el equipo afronta el desafío de ser perfectos para lograr la ansiada clasificación a la final de la Libertadores, donde se espera que hagan valer su condición de local: "Necesitamos ser más eficaces, ganar duelos y, sobre todo, concretar las oportunidades generadas.

En el fútbol, se gana y se pierde definiendo", concluyó.

Con todo esto, River Plate se prepara para una cita crucial donde el orgullo y el deseo de avanzar en el torneo estarán en juego.