River Plate avanzó a los cuartos de final del torneo tras derrotar a Barracas Central en un partido dominado de principio a fin en el Estadio Monumental, con goles y buen rendimiento del equipo. La ilusión de pelear por el título continúa intacta.
River Plate continúa con su racha imparable en el torneo local. Hace casi un mes, el equipo dirigido por Marcelo Gallardo mostró un rendimiento sobresaliente, y en su último encuentro en el Estadio Monumental, confirmó su clasificación a los cuartos de final, tras una convincente victoria frente a Barracas Central.
El equipo millonario, que domina en la primera división argentina, salió con todo desde el inicio y consiguió una ventaja temprana que le permitió manejar el ritmo del encuentro con autoridad.
El primer gol del partido llegó antes de los 15 minutos, cuando un saque de esquina fue aprovechado por Paulo Díaz, quien con un remate preciso en el área chica puso a River en ventaja.
Este gol no solo dio tranquilidad, sino que también estableció la pauta para el desarrollo del partido, en el que la diferencia de jerarquía entre ambos equipos se notó claramente.
Desde ese momento, River se adueñó del control del balón, buscando ampliar su ventaja con jugadas rápidas y combinaciones precisas.
El juego de River fue caracterizado por una movilidad constante. Nacho Fernández, en un gran momento de forma, volvió a marcar y contribuyó al dominio del equipo. El joven de 17 años, Mastantuono, mostró prometedor talento, amagando tanto con y sin balón, y generando mucho peligro por la banda derecha. Además, la participación de otros jugadores como Driussi, Colidio y Castaño fue fundamental para mantener la búsqueda del gol y crear riesgos en la defensa rival.
Barracas Central, por su parte, intentó mantenerse firme pero careció de recursos para contrarrestar el poder ofensivo del conjunto local. Solo pudo realizar algunas llegadas aisladas, y su arquero tuvo trabajo en varias ocasiones. El visitante intentó sostenerse en el juego, pero la diferencia técnica fue evidente, y en varias oportunidades se vieron obligados a recurrir a largos pelotazos sin resultado.
Tras el primer tanto, River aprovechó varias jugadas de balón detenido. En una de ellas, Insua cometió una falta sobre Nacho Fernández, que facilitó una oportunidad clara para los locales. Castaño sirvió un centro preciso desde la banda derecha, Montiel peinó la pelota y Paulo Díaz, con una definición suave, amplió la ventaja. La ventaja se reflejaba en el marcador y en la actitud del equipo, que seguía buscando más goles.
River Plate se corona campeón de la Primera División y se consolida como el club más exitoso
River Plate logró su 37º título de Primera División y se convierte en el club más ganador en la historia del fútbol argentino. El equipo millonario, que ascendió a la categoría máxima en 1908, ha cosechado numerosos campeonatos a lo largo de su trayectoria, alcanzando un total de 70 títulos locales e internacionales.En el segundo tiempo, River continuó controlando el juego. Enzo Pérez fue una pieza clave en la recuperación del balón y cortó las intenciones de Barracas de avanzar. Gallardo realizó algunos cambios para reforzar el medio y mantener la autoridad en el campo. Mastantuono fue protagonista de una acción que casi termina en gol tras un desborde y un centro que Nacho Fernández no pudo convertir debido a la Gran intervención del arquero rival.
Posteriormente, Bustos tuvo una oportunidad clara en una contra, pero su disparo fue detenido por el arquero visitante.
El tercer gol llegó en un contragolpe final, cuando Acuña se encontró con un rebote y lanzó un remate desviando en un defensor que terminó en el fondo de la red, asegurando la goleada y la clasificación.
Aunque hubo algunas decisiones arbitrales dudosas, como una posible falta en la jugada del gol anulado de Bruera, la superioridad de River fue evidente durante los 90 minutos.
El equipo de Gallardo mostró un rendimiento que ha ido en ascenso en las últimas semanas, con un fútbol que combina orden, velocidad y precisión.
La clasificación a los cuartos de final llega en un momento crucial de la temporada, reforzando la ilusión de mantenerse en la lucha por el campeonato.
El próximo rival será Platense, y el encuentro se jugará en el mismo estadio, dando continuidad a la buena racha.
En cifras, la victoria confirmó la senda positiva del equipo, que en los últimos partidos ha mostrado una mejoría notable tanto en ataque como en defensa.
La afición, ilusionada, espera que este impulso los lleve a pelear por el título nacional e internacional. El futuro cercano en la competencia será decisivo para River, que sigue soñando con grandes conquistas, impulsado por la jerarquía de sus jugadores y la visión estratégica de su entrenador.
