El nuevo capítulo de Marcelo Gallardo al mando de River Plate busca recuperar la identidad futbolística y el espíritu competitivo del equipo.
Marcelo Gallardo ha comenzado su segundo ciclo como entrenador de River Plate, y su debut está programado para el próximo sábado a las 20:30, cuando el equipo se enfrente a Huracán en la décima jornada de la Liga Profesional.
Este encuentro servirá como un aperitivo antes del correspondiente enfrentamiento contra Talleres de Córdoba, que tendrá lugar en los octavos de final de la Copa Libertadores.
En medio de un apretado calendario, la llegada de Gallardo no es simplemente una cuestión de urgencias, sino que también implica un profundo trabajo en la construcción de una identidad futbolística sólida para el equipo.
En su presentación oficial, Gallardo se mostró agradecido con los aficionados riverplatenses, destacando el amor y apoyo incondicional que ha recibido a lo largo de su carrera, especialmente durante su tiempo como entrenador.
'Quiero que se sientan identificados con el equipo.
Ese es mi trabajo', manifestó Gallardo, resaltando su intención de devolver ese cariño a través del rendimiento del plantel.
En el último año y medio, River ha luchado por encontrar su estilo de juego, una característica que antes lo definía y que ahora ha desaparecido.
Aunque el equipo logró tres títulos de la mano de Martín Demichelis, la afición se ha sentido inquieta por no saber a qué juega el plantel.
Gallardo ha dejado claro que recuperar la esencia y el carácter característico de River es fundamental: 'Necesitamos volver a tener el deseo de construir y recuperar el espíritu de equipo', comentó el entrenador de 48 años.
El proceso ya ha comenzado y aunque no existen fórmulas mágicas para lograrlo, sí es cierto que la clave está en el esfuerzo y la dedicación.
Gallardo es conocido por su enfoque disciplinado sobre el trabajo, enfatizando la importancia de la intensidad durante los entrenamientos.
Según fuentes cercanas, ya ha iniciado las sesiones de práctica, tratando de elevar la moral de un grupo que ha enfrentado altibajos en los últimos tiempos.
Las charlas motivacionales son parte del plan para revitalizar el ánimo de los jugadores.
Se ha reportado que algunos futbolistas, que anteriormente mostraban un semblante abatido, han recuperado entusiasmo luego de las primeras interacciones con Gallardo.
Esta renovación de energía es crucial para afrontar los desafíos venideros.
En cuanto al desarrollo del juego, la incógnita está en qué esquema táctico adoptará Gallardo.
Su enfoque ha evolucionado a lo largo de su carrera, pero la esencia de su propuesta siempre ha sido clara: busca un equipo proactivo que asuma el control del balón y se muestre ofensivo.
Entre las opciones tácticas que podría considerar están el uso de uno o dos volantes centrales, o incluso variar entre cinco mediocampistas y un delantero o cuatro mediocampistas y dos atacantes, dependiendo de las circunstancias.
Además, se espera que los refuerzos solicitados por el entrenador aporten un nivel significativo al equipo.
La incorporación de futbolistas como Maxi Meza, un extremo habilidoso, o defensores de calidad como Fabricio Bustos y Germán Pezzella, refleja una visión clara hacia la creación de un equipo equilibrado.
El plan de Gallardo no solo busca continuar el legado de su primer ciclo, sino también profundizarlo, impulsando a River hacia un estilo que le permita competir en todos los frentes, especialmente en la exigente Copa Libertadores que se avecina.