La Academia logra una contundente victoria ante el equipo brasileño en un partido lleno de intensidad y buen juego.

El himno de la hinchada entona un estribillo que surgió en 2001, un año complicado para la Argentina pero glorioso para Racing.

'Hoy no puedes perder, tienes que dar la vuelta', cantaban los aficionados con pasión.

La victoria sobre Bragantino reunió todos los ingredientes en el campo: buen juego, despliegue, dominio, agresividad y una goleada contundente.

Fue la segunda victoria consecutiva en la Copa Sudamericana y el mejor partido hasta ahora bajo la dirección de Gustavo Costas.

A pesar de las ocho bajas, incluida la de Juan Fernando Quintero que tuvo que ausentarse por motivos familiares, Racing se impuso con un esquema táctico bien definido.

El partido comenzó con un gol tempranero de Maximiliano Salas tras una excelente asistencia de Adrián Martínez.

La Academia mantuvo el control del juego durante todo el primer tiempo, sometiendo a un Bragantino desdibujado.

En la segunda mitad, los brasileños intentaron reaccionar con cambios en el equipo, pero Racing supo mantener la ventaja y aprovechar los espacios para llegar con peligro al arco rival.

Salas se destacó como la figura del partido, mostrando su velocidad y calidad en el juego.

La defensa de Racing se mostró sólida y resistió los intentos de Bragantino, que terminó con un hombre menos por la expulsión de Capixaba.

Con un gol de Roger Martínez, Racing selló una importante victoria que ilusiona a sus seguidores en la Copa Sudamericana.