En un giro notable para el fútbol paraguayo, la selección nacional, bajo la dirección de Gustavo Alfaro, ha comenzado a cosechar resultados significativos en su camino hacia el Mundial de 2026, que se celebrará en varios países de América del Norte.

La reciente victoria por 2-1 sobre Argentina en Asunción ha reafirmado la posición de la Albirroja en la clasificación de la Confederación Sudamericana de Fútbol, colocándola en el sexto puesto, que actualmente otorga un boleto para la próxima Copa del Mundo.

Un año dorado para el equipo, que al inicio de estas eliminatorias sólo había acumulado cinco puntos y marcado un único gol en seis partidos.

Esto se debió a una etapa de transición complicada que incluyó la dirección de Guillermo Barros Schelotto y de Daniel Garnero, antes de que Alfaro tomara las riendas del conjunto.

La Copa América anterior fue especialmente dura, y Garnero fue reemplazado después de resultados decepcionantes.

Desde que asumió, el panorama ha cambiado drásticamente.

En las últimas cinco jornadas de estas eliminatorias, Alfaro ha guiado a Paraguay a una recolección de 11 puntos, enfrentándose a rivales de gran nivel.

Además de la victoria sobre los argentinos, el equipo logró sobreponerse a Brasil y Venezuela, y mantuvo dos empates sin goles en terrenos difíciles: contra Uruguay y Ecuador.

Esta secuencia de triunfos en casa es la mejor que ha tenido la Albirroja en un proceso clasificatorio rumbo a una Copa del Mundo desde hace 16 años, un récord muy difícil de igualar.

Los aficionados paraguayos pueden recordar que el último mundial en el que su equipo logró brillar fue en Sudáfrica 2010, donde llegaron a los cuartos de final.

Hoy, muchos miran con esperanza y están emocionados por la posibilidad de regresar a ese escenario internacional.

Este equipo es el mismo que no logró las actuaciones esperadas durante el ciclo anterior, y jugadores como Gustavo Gómez y Miguel Almirón están mostrando un rendimiento renovado.

El delantero Antonio Sanabria ha emergido como una de las figuras destacadas del equipo, marcando importantes goles, incluyendo una espectacular chilena en el match contra Argentina.

Esta es una notable evolución para él, quien en sus primeros 31 partidos solo había anotado tres veces, pero ha encontrado su ritmo en los encuentros recientes, anotando cuatro de los seis goles que Paraguay ha conseguido en esta eliminatoria.

Alfaro ha reflexionado sobre el cambio que ha experimentado su equipo, señalando que el compromiso es ahora la clave.

"No tenemos expectativas, tenemos compromiso", declaro el entrenador.

Esto ha llevado a que los jugadores se enfrenten a retos que antes parecían inalcanzables, como ganar a Brasil y no perder en Uruguay.

El próximo partido será crucial, ya que Paraguay se enfrentará a Bolivia en el Estadio Municipal de Villa Ingenio en El Alto, donde no contará con Omar Alderete por acumulación de tarjetas amarillas.

Sin embargo, Alfaro mantiene un optimismo firme y asegura que el equipo tiene la rebeldía necesaria para continuar su camino hacia el Mundial.

"Si seguimos con esta predisposición, no tengo dudas de que estaremos presentes en la Copa del Mundo", concluyó.