El técnico de Paraguay comparte una emotiva anécdota con el fallecido Papa Francisco y rinde homenaje a su legado.

El mundo entero se encuentra de luto tras la impactante noticia del fallecimiento del Papa Francisco, un líder espiritual que tocó la vida de millones.
La tristeza por su partida se siente tanto entre los creyentes como entre quienes no comparten esa fe. Las manifestaciones de cariño y respeto se han multiplicado en todo el planeta, con homenajes que llegan desde todos los rincones. En el ámbito del fútbol, varias estrellas han expresado su dolor, entre ellas Lionel Messi, quien dejó un mensaje sentído en sus redes sociales.
Uno de los homenajes más emotivos llegó del técnico de la selección de Paraguay, Gustavo Alfaro, quien tuvo la oportunidad de conocer al Papa en una audiencia pública en el año 2014.
Alfaro compartió con sus seguidores lo conmovedor que fue ese día y cómo la figura de Francisco siempre destacó por su amor hacia el fútbol y su conexión con la juventud.
En sus palabras, rememoró aquella ocasión especial: "Esta mañana no fue una mañana más. Como siempre me levanté temprano y con los hábitos y rutinas cotidianas tomé mi teléfono y leí la triste noticia: El Papa Francisco nos había dejado”.
El exentrenador de Boca Juniors relató que, junto a su familia, tuvo el privilegio de ser recibido en la Plaza San Pedro. El Papa argentino, conocido como el "Papa del fin del Mundo", se destacó por recibir a deportistas de diversas disciplinas con su alegría característica.
El Papa Francisco acelera su agenda de reformas en la Iglesia Católica
El Papa Francisco está llevando a cabo cambios revolucionarios en personal y políticas en la Iglesia Católica, en línea con su consejo de 'hacer un lío'. Con su visita a Portugal para la Jornada Mundial de la Juventud, está buscando solidificar los cambios necesarios para el siglo XXI y contar con la próxima generación de fieles y líderes para implementarlos. Además, está promoviendo un Sínodo en el Vaticano que se centrará en temas importantes como la inclusión de los católicos LGBTQ+ y las mujeres en la iglesia, dando voz y voto a las mujeres y los jóvenes por primera vez en la historia de la iglesia.En su mensaje, Alfaro no solo rindió homenaje a su figura, sino que también recordó una anécdota divertida que vivió con él.
"Mientras esperábamos a que se aproxime, yo tenía una camiseta de Arsenal, equipo que dirigía en ese entonces. Él se acerca, bendice a mi familia y le entrego la camiseta; en ese instante Francisco me mira y me dice: 'Me parece que empatamos con ustedes', y yo le digo: 'Santo Padre, me parece que usted está rezando demasiado, porque el último partido en la final de la Copa Argentina lo ganamos 3 a 0”.
Aquel encuentro se remonta a la final de la Copa Argentina 2013, donde Arsenal se impuso a San Lorenzo.
Alfaro recordó que, en ese momento, el Papa se rió y le respondió: "Me habré quedado dormido por la diferencia horaria, pero creo que íbamos empatando”, agregando su característica petición: "Recen por mí".
La conexión entre el Sumo Pontífice y el fútbol era evidente, siendo San Lorenzo su equipo de corazón, así como su amor por los deportes en general.
Al despedirse, Alfaro expresó su deseo de que "su alma descanse en paz, Francisco. Que Dios ilumine el camino de quién tome su lugar. Su obra, y su legado hablarán por Usted". En un momento de tristeza colectiva, las palabras de Alfaro resonaron, reflejando la profunda admiración y el cariño que el Papa Francisco logró sembrar en todos aquellos que tuvieron el privilegio de conocerlo.