El legendario entrenador Gregg Popovich anunció su transición a la posición de Presidente de Operaciones de San Antonio Spurs después de recuperarse de un derrame cerebral, dejando en manos de Mitch Johnson la dirección del equipo de la NBA.

El pasado lunes marcó un momento importante en la historia del baloncesto profesional, ya que Gregg Popovich, uno de los entrenadores más influyentes y respetados en la liga de la NBA, realizó su primera aparición pública tras sufrir un derrame cerebral hace aproximadamente seis meses.
Acompañado por Emanuel Ginóbili y Tim Duncan, míticos exjugadores de los Spurs, Popovich ofreció una conferencia de prensa en la que presentó oficialmente a Mitch Johnson como su sucesor en la dirección técnica del equipo.
Durante su intervención, Popovich manifestó un tono más suavizado y con dificultades en su movilidad, pero con una actitud positiva y de agradecimiento.
aseguró que su salud estaba en mejoría y que, tras pensar en lo que era mejor para la organización, decidía dar un paso al costado de la labor de entrenador para desempeñar un nuevo rol en la franquicia.
En particular, expresó plena confianza en Mitch Johnson, quien desde hace tiempo venía realizando un trabajo destacado con el equipo.
Con un toque de humor, Popovich se quitó con la ayuda de Ginóbili y Duncan una camiseta blanca que portaba, en la que se podía leer en español “El Jefe”.
Luego, mostró otra prenda que llevaba puesta, con la leyenda: “Señor Popovich. Presidente de Operaciones de Básquetbol”. En su discurso, afirmó con humildad y entusiasmo: “Ya no soy el entrenador. Ahora soy ‘el jefe’”, generando risas entre el público presente.
El entrenador, de 76 años, no ocultó su gratitud hacia todos los que lo apoyaron durante su recuperación. También resaltó la importancia de su viejo equipo y de la familia Spurs, una organización que ha sido su casa durante casi tres décadas. Recordó que en sus años al mando del equipo, logró convertir a los Spurs en un referente en la NBA, logrando cinco campeonatos en las temporadas de 1999, 2003, 2005, 2007 y 2014, con la presencia destacada de Ginóbili.
El pasado 4 de noviembre, la franquicia texana sorprendió a la comunidad del baloncesto mundial al anunciar que Popovich se tomaría un descanso indefinido debido a problemas de salud, sin hacer referencia en ese momento a la causa exacta.
Solo nueve días después, confirmaron que había sufrido un leve accidente cerebrovascular en un partido contra los Minnesota Timberwolves.
Desde entonces, la franquicia ha mantenido el mismo liderazgo en la dirección técnico y en las operaciones del equipo, asegurando estabilidad y continuidad en sus valores.
R.C. Buford, director ejecutivo, y Brian Wright, gerente general, continuarán en sus cargos, fortaleciendo la estructura consolidada que Popovich ayudó a construir.
La incorporación de Mitch Johnson como nuevo entrenador marca un momento clave en la historia del equipo. Johnson, quien había asumido interinamente tras la hospitalización de Popovich, expresó su honor y entusiasmo por continuar el trabajo que comenzó el legendario entrenador.
En su primer mensaje, agradeció a Popovich por sus enseñanzas y destacó que una de las principales lecciones fue la importancia de las relaciones humanas y del compromiso con las personas.
Popovich, considerado uno de los entrenadores más influyentes en la historia de la NBA, dejó en su legado valores que perdurarán en la franquicia y en la liga.
Su impacto trasciende los títulos deportivos, pues también fue un ejemplo de liderazgo, perseverancia y humanidad.
La historia de Popovich en los Spurs, que inició en 1996 y se extendió por casi 29 años, es una de las más exitosas y respetadas del baloncesto mundial.
Durante su mandato, además de los campeonatos, estableció récords y sentó bases para otras generaciones. La comunidad del baloncesto celebra hoy su recuperación y la continuidad de una organización que busca mantener sus valores y el espíritu competitivo que siempre la ha caracterizado.
A lo largo de su carrera, Popovich no solo conquistó títulos, sino que también fue un innovador y un referente en el deporte y en la gestión de equipos.
Su historia continúa en esta nueva etapa, donde seguramente seguirá dejando huella en el mundo del baloncesto.