La primera entrega de la Serie Mundial entre los Dodgers de Los Ángeles y los Yankees de Nueva York obtuvo una audiencia excepcional, destacándose como el juego más visto en cinco años.

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El pasado viernes, los Dodgers de Los Ángeles se impusieron a los Yankees de Nueva York con un emocionante marcador de 6-3 en el primer juego de la Serie Mundial, logrando así captar la atención de 15,2 millones de espectadores a través de diversas plataformas, incluyendo Fox y sus servicios de streaming.

Este impresionante número de espectadores convierte al encuentro en la final de la Major League Baseball más vista en los últimos cinco años.

La culminación del partido se dio con un espectacular Grand Slam de Freddie Freeman en la décima entrada, lo que resultó en una victoria intensa para el equipo californiano.

Este evento es significativo no solo por el resultado, sino también porque solo ha habido cuatro ocasiones desde 2018 en las que la audiencia de un juego de la Serie Mundial superó la cifra de 15 millones.

La última vez que se alcanzó esta marca fue durante el séptimo y definitorio juego de la serie de 2019, donde los Nacionales de Washington se consagraron campeones al derrotar a los Astros de Houston.

El comisionado de la MLB, Rob Manfred, expresó su entusiasmo respecto a la audiencia, señalando que el duelo representa una oportunidad para promover el béisbol en diferentes sectores, enfatizando la importancia de centrarse en los jugadores y el crecimiento internacional del deporte.

"Los ratings fueron realmente buenos anoche.

Este es un momento perfecto para amplificar todo lo que hemos venido trabajando en los últimos años", mencionó.

De acuerdo con Nielsen, la audiencia alcanzó un pico de 17,8 millones de espectadores durante la décima entrada hasta el final del juego.

Esta cifra representa un impresionante aumento del 62% en comparación con el primer juego de la Serie Mundial del año pasado, que fue el menos visto en la historia, promediando solamente 9,35 millones de espectadores.

Este primer partido se convierte en el más visto desde el encuentro entre los Dodgers y los Astros en 2017, que promedió 15,33 millones de espectadores.

Por otro lado, el rating en Los Ángeles fue de 19,1 y de 13,2 en Nueva York, lo que demuestra la gran atención que genera el béisbol en estas ciudades emblemáticas.

Es importante recordar que la Serie Mundial ha tenido varias ediciones memorables a lo largo de su historia, donde el espectáculo no solo radica en la competencia en el campo, sino en el atractivo televisivo que estos encuentros suelen generar.

En 2017, el tercer juego también había alcanzado una gran sintonía y se convirtió en el evento deportivo más visto de esa noche.

Manfred, optimista, ha indicado que espera resultados igualmente positivos en países como Japón, donde el juego fue transmitido horas después de su finalización en Estados Unidos.

En resumen, el emocionante inicio de la Serie Mundial ha dejado grandes expectativas para lo que vendrá en los próximos partidos.