Adrián Martínez, conocido como Maravilla, pasó de estar preso por error a convertirse en el máximo artillero de la Copa de la Liga. Su rendimiento en Racing ha sido extraordinario y ha sorprendido a propios y extraños.

En una historia que podría ser digna de una serie policial como El Marginal, el delantero de 31 años Adrián Martínez, apodado Maravilla, tuvo un giro radical en su vida.

Hace diez años estuvo preso por error durante 7 meses en el penal de Campana, su ciudad natal.

Pero hoy, se encuentra en la cúspide de su carrera como el máximo goleador de la Copa de la Liga, título que comparte con Miguel Borja de River, con 10 goles en 12 partidos, con solo 13 remates al arco.

Su efectividad es asombrosa con un total de 11 goles en 13 encuentros, incluyendo su gol en la Copa Argentina.

En términos monetarios, Martínez ha logrado un valor impresionante.

Si convertimos sus logros a euros, el delantero ha sido valuado en más de 10 millones de euros.

Su paso por Primera División ha sido destacado, con 29 goles en 54 partidos, lo que lo convierte en una fuerza a tener en cuenta en el ámbito futbolístico internacional.

Con dos hat-tricks en la Copa de la Liga, Martínez ha dejado en claro su talento y determinación.

La carrera de Martínez ha sido un ejemplo de superación.

Desde sus inicios en el ascenso argentino hasta su desempeño actual en Racing, el delantero ha demostrado constancia y sacrificio.

Su paso por clubes paraguayos como Libertad y brasileños como Curitiba, antes de llegar a Racing, le han valido una reputación como un goleador letal y una referencia en el área.

En lo que respecta a asistencias, Martínez ha demostrado que su objetivo principal es el gol, con apenas una asistencia en su historial.

Sin embargo, su capacidad para marcar goles a equipos grandes como River, Independiente y Boca, lo ha consolidado como una figura prominente en el fútbol argentino.

Con su participación en la Copa Sudamericana, Martínez buscará seguir brillando y liderar a Racing hacia la gloria en el torneo continental.