El entrenador de Independiente, Julio Vaccari, se pronuncia sobre la fiesta de sus jugadores y las sanciones que enfrentan.

Julio Vaccari, el técnico del Club Atlético Independiente, ha manifestado su postura ante los recientes incidentes que involucran a sus jugadores.

Después de un empate 1-1 contra Godoy Cruz, Vaccari no dudó en hablar sobre la fiesta que protagonizaron algunos futbolistas el fin de semana pasado y las sanciones impuestas a Marco Pellegrino y Diego Tarzia.

Su franca apertura es un sello distintivo de su estilo, lo que le ha valido el respeto y la crítica por igual.

Con respecto a la celebración que tuvo lugar en un yate, Vaccari commentó: "Ya estaba al tanto de lo que había ocurrido el sábado.

Me llegaron todas las fotos y videos de la fiesta.

Los jugadores pueden hacer lo que deseen en su tiempo libre, siempre que cumplan en el campo de entrenamiento y durante los partidos.

Sin embargo, debo aclarar que no apruebo lo que hicieron y trato de aconsejarles sobre cómo y dónde salir.

Personalmente, en mi día libre prefiero quedarme en casa.

No hay nada que objetar sobre ese día, pero es necesario corregir ciertas actitudes.

Creo que no es el camino indicado para su desarrollo profesional."

El entrenador también se refirió a las sanciones aplicadas a Tarzia y Pellegrino, destacando que se trata de situaciones que ponen en jaque la integridad institucional del club: "Lo de Tarzia y Pellegrino es una situación diferente.

Cuando algo pone en duda la salud institucional del club, es necesario actuar.

No me gusta imponer castigos ni multas; prefiero explicar y dar varias advertencias.

Los problemas internos deben resolverse en el vestuario.

Aún no tengo claro hasta cuándo durarán las sanciones."

En relación a los jóvenes talentos del equipo, Vaccari ofreció sus reflexiones sobre Santiago López.

El entrenador expresó su preocupación por el peso que se le pone a los jóvenes jugadores, señalando: "A veces se les asigna una responsabilidad que es demasiado pesada.

Santiago tiene mucho potencial, pero crecer con esa carga es complicado.

Estamos trabajando con él, y a veces lo hacemos de manera cariñosa y otras veces con firmeza.

Lo más importante es que crezca sin esa pesada carga.

Este problema no solo lo afecta a él, sino a otros jóvenes también.

Para poder manejar esa responsabilidad, hay que estar preparado.

Debemos comenzar a moderar las exigencias, tanto de parte del club como del cuerpo técnico."

Vaccari también dedicó unas palabras a Joaquín Laso, un jugador que ha tenido su propio conjunto de desafíos.

"Me entristece su situación, sin importar cómo juegue.

Lo veo entrenar y reconozco su compromiso, es un ejemplo para todos.

Defiendo a los profesionales que se comportan de manera adecuada."

El enfoque directo y honesto de Vaccari hacia los problemas no solo revela su preocupación por la actualidad del club, sino también su deseo genuino de mejorar y formar a sus jugadores en un ambiente saludable y profesional.

En una liga donde las presiones son constantes, su capacidad para lidiar con estos conflictos será clave en el futuro del equipo.