El club Independiente no logró su objetivo de contar con un aforo del 100% en el Estadio Libertadores de América-Ricardo Bochini para el encuentro que se avecina contra River Plate.

La justicia de Avellaneda ha establecido que solamente se permitirá un incremento del 5% en la capacidad de las tribunas populares, lo que significa que se podrá utilizar el 55% de las mismas.

La decisión del Juzgado de Garantías N°1 de Avellaneda, bajo la supervisión de la jueza Mariela Bonafine, se produce tras la solicitud del fiscal Mariano Zitto, quien había pedido la clausura del estadio debido a serias preocupaciones sobre la seguridad estructural después de un incidente en el partido entre Huracán y Argentinos Juniors por la Copa Argentina.

Durante ese encuentro, se observó el desplazamiento del concreto en algunas áreas, lo que generó inquietudes sobre la seguridad de los asistentes.

Zitto explicó que tras recibir informes preliminares de Defensa Civil y la Municipalidad de Avellaneda, se decidió contratar los servicios de un ingeniero estructural ajeno tanto al club como al municipio para evaluar el riesgo potencial.

Los peritos han señalado que los principales problemas detectados son los anclajes oxidados, lo que no es evidente a simple vista y requiere de un análisis más profundo.

Con base en la trágica experiencia del Incendio de Cromañón, el fiscal pidió de manera cautelar que los partidos se disputaran sin público hasta que se verifique la seguridad total en el recinto.

Lejos de lo que se podía esperar, en el encuentro anterior que tuvo lugar en Avellaneda, donde Independiente enfrentó a Rosario Central, el aforo fue limitado a un 50% en las cabeceras.

Ante la situación, la dirección del club se presentó en una audiencia en el Juzgado para intentar convencer a las autoridades sobre la viabilidad de permitir el aforo total basándose en informes técnicos que avalan la restauración y seguridad de las instalaciones.

Desde el club manifestaron su compromiso con la seguridad y presentaron la documentación que acreditaba las reparaciones realizadas.

Las expectativas para el clásico contra River Plate son altas, pero ahora el foco se centra en cómo se implementará el canje de bonos para los hinchas, ya que aún se espera un comunicado oficial del club.

Este encuentro tiene un gran significado histórico, pues ambos equipos tienen una rivalidad centenaria en el fútbol argentino, lo que añade un componente extra de tensión a la situación.

En resumen, las circunstancias actuales han llevado a la reducción del aforo en el Estadio Libertadores de América, lo que ha generado desilusión entre los hinchas de Independiente que esperaban una mayor presencia en este duelo tan trascendental.