Independiente, con el sueño de conquistar nuevamente la Copa Sudamericana, se prepara para su debut ante Nacional de Potosí en Bolivia, enfrentando no solo a un rival deportivo, sino también a la complejidad de la altitud.

Independiente de Avellaneda, conocido como el Rey de Copas, tiene la ambición de volver a brillar en el ámbito internacional a través de la Copa Sudamericana, un torneo en el que ya ha dejado huella con triunfos en 2010 y 2017.
Este martes, el club argentino se enfrentará al Nacional de Potosí en Bolivia, marcando su estreno en la edición de este año. En total, cinco equipos argentinos están en la contienda, incluyendo a Huracán, Godoy Cruz, Lanús y Defensa y Justicia.
Después de tres años de ausencias en competiciones internacionales, centrados principalmente en asegurar su permanencia en la primera división, el Indio ha recuperado su estatus en el fútbol argentino, liderando la zona B del Torneo Apertura y destacándose como el equipo más goleador del campeonato.
Este nuevo ímpetu lo tiene preparado para abordar la Sudamericana con la misma determinación que ha demostrado en el ámbito doméstico.
Independiente llega a este encuentro con una abultada victoria por 4-0 ante Godoy Cruz, lo que ha elevado la moral del equipo dirigido por Julio Vaccari.
Sin embargo, no será un camino fácil; además de enfrentarse al Nacional de Potosí, el equipo deberá lidiar con la notable altitud del lugar, que se encuentra a 4.090 metros sobre el nivel del mar. Este hecho representa un desafío considerable para cualquier visitante.
El viaje hacia Potosí ya ha comenzado con su respectivo itinerario complicado. La plantilla se trasladará primero a Sucre, donde pasará la noche a una altitud de 2.750 metros para acostumbrarse a la menor densidad de oxígeno. Posteriormente, en la mañana del partido, se moverán en grupos de cuatro en camionetas 4x4 para recorrer el arduo camino hacia su destino final. Este trayecto de tres horas y media es famoso por su terreno irregular lleno de curvas y precipitaciones amenazantes.
Independiente busca mejorar su rendimiento como visitante en la Liga Profesional
El equipo argentino Independiente está trabajando para mejorar su desempeño como visitante en la Liga Profesional. A pesar de haber obtenido una importante victoria ante Huracán en su estadio, el Libertadores de América, el equipo dirigido por Ricardo Zielinski reconoce la necesidad de ganar fuera de casa. Hasta el momento, Independiente ha sumado 14 de los 18 puntos posibles como local, mostrando una gran fortaleza en su cancha. Sin embargo, lejos de su estadio, el equipo no ha logrado victorias desde la primera fecha del torneo. En total, ha disputado 10 partidos como visitante, obteniendo 5 derrotas y 5 empates. Ante esta situación, Zielinski ha destacado la importancia de hacerse fuerte tanto de local como de visitante para poder pelear por el campeonato. El técnico no descarta la posibilidad de cambiar el esquema de juego para el próximo encuentro contra Gimnasia La Plata. Por su parte, los jugadores del equipo también han reconocido la necesidad de mejorar su rendimiento fuera de casa, haciendo especial énfasis en la confianza, la actitud y el apoyo de la afición. Martín Cauteruccio, goleador del equipo, ha señalado que es fundamental replicar lo logrado en su estadio, donde han demostrado concentración y buen juego. En resumen, Independiente busca corregir su desempeño como visitante para mantener su regularidad en la Liga Profesional y seguir peleando por el campeonato.Este debut tiene un significado especial para Independiente, que busca no solo ganar un trofeo tras más de siete años de espera, sino también romper la racha de éxito reciente de su rival, Racing Club, que ha alzado dos títulos internacionales en el último tiempo.
Además, el Rojo quiere reafirmar su estatus como el equipo más laureado de la Copa Sudamericana.
En la historia del fútbol argentino, Independiente es ampliamente reconocido por su palmarés, siendo el club con más títulos en la Copa Libertadores (siete en total).
La última vez que levantaron la Copa Sudamericana fue en 2017, una victoria inolvidable ante Flamengo que quedó grabada en la memoria de sus aficionados.
En esta nueva edición, el equipo buscará no solo celebraciones personales, sino también limitar la celebración de sus rivales.
En la misma línea, otros clubes argentinos también intentan dejar su huella en la Sudamericana. Huracán, Godoy Cruz, Lanús, Unión y Defensa y Justicia, aunque algunos han tenido trayectorias irregulares en torneos nacionales, llegan motivados para demostrar su potencial en la escena internacional.
Unión, por ejemplo, hará su debut ante Cruzeiro, mientras que Godoy Cruz se alista para enfrentar a Grau.
El fútbol argentino se enfrenta a un reto doble: mantener el equilibrio competitivo entre sus equipos y la presión que representan clubes brasileños, que tienen una marcada tradición y recursos que los confieren una ventaja en torneos internacionales.
Independiente sabe que este es un año crucial; no sólo están buscando la gloria en la Sudamericana, sino también reafirmar su legado en este apasionante deporte.