El delantero de Lanús expresa su frustración por decisiones arbitrales en la reciente igualdad frente a Central Córdoba, subrayando el uso del VAR y su impactante trayectoria en el club.

Tras el encuentro entre Lanús y Central Córdoba, que culminó en un empate, Lautaro Acosta, delantero del club granate, no pudo ocultar su descontento con las decisiones arbitrales.

Después del partido, Acosta manifestó: "Está todo contaminado", refiriéndose a lo que considera una falta de justicia en los fallos de los árbitros.

Este compromiso fue especial para Acosta, ya que marcó su partido número 400 en la máxima categoría con Lanús.

Sin embargo, su alegría por el hito personal se vio opacada por la polémica que rodeó el encuentro.

Uno de los momentos más discutidos fue la tarjeta roja mostrada a Jonathan Torres a tan solo cinco minutos de iniciado el segundo tiempo.

Acosta fue claro al afirmar que la expulsión fue justa, aunque su tono cambió al hablar sobre el penal concedido a Central Córdoba.

"El penal no lo cobró él, lo llamaron desde el VAR y después de revisar, decidieron que hubo mano de Dylan Aquino", explicó Acosta, poniendo en duda la decisión a pesar de que las imágenes parecen confirmar la infracción.

Los problemas de arbitraje en el fútbol argentino no son nuevos.

Historias similares han surgido en el pasado, donde clubes sienten que son víctimas de un tratamiento desigual.

Un hecho notorio ocurrió hace unos meses cuando el árbitro Sebastián Zunino no pitó un penal a Barracas Central en una jugada similar, donde el defensor mostró un comportamiento que muchos consideraron inconsistente.

"Lo que realmente me molesta es el criterio que se utiliza.

A nosotros no nos han dado un penal en nueve meses, pero he visto otros partidos donde sí se otorgaron penales en situaciones similares", comentó Acosta, lo que refleja el descontento generalizado en el ámbito futbolístico local.

El delantero también advirtió sobre la presión que siente el ambiente mediático, comentando que sus compañeros en la prensa le aconsejan a menudo que no se exprese abiertamente sobre estos problemas.

Acosta aludió a la controversia que rodeó a otros clubes que han cuestionado decisiones arbitrales en el pasado.

Expresó que muchos sienten que el hablar abiertamente solo puede perjudicarlos en futuras ocasiones y mencionó el caso de Carlos Tevez, exentrenador de Independiente, que generó revuelo tras comentar sobre la gestión de Pablo Toviggino, tesorero de la AFA.

"El sistema es totalmente vergonzoso y necesitamos alzar la voz para que cambie", agregó Acosta, quien se siente responsable de señalar estas injusticias, no solo por su situación actual, sino como representante de todos los futbolistas afectados por la supuesta falta de equidad en el arbitraje.

A pesar de la polémica, Lanús se prepara para su próximo desafío, donde jugará en La Fortaleza contra Liga de Quito en la Copa Sudamericana, en la que un empate los clasificaría a los cuartos de final.

La tensión generada por las declaraciones de Acosta probablemente continúe resonando en el entorno futbolístico y en las redes sociales.