Los encuentros entre Atlanta y All Boys estuvieron marcados por actos de discriminación y violencia, que llevaron a sanciones y condenas por parte de las autoridades deportivas y judiciales argentinas.

La confrontación, que en teoría sería un evento deportivo, se ha visto empañada en varias ocasiones por acciones que desde el ámbito social y legal condenan enérgicamente.
El último incidente ocurrió antes del encuentro en el estadio de Floresta, cuando un grupo de hinchas de Atlanta mostró un ataúd pintado con la bandera de Israel, además de banderas de Palestina e Irán.
Asimismo, repartieron panfletos con mensajes amenazantes y ofensivos, que decían: "Palestina libre. Villa Crespo, barrio de cobardes. Israel y Atlanta son la misma basura". Estos actos de intolerancia reflejan la tensión política y social que atraviesa la región en medio del conflicto en Medio Oriente.
Minutos antes del partido, en los alrededores del estadio, otros hinchas encapuchados trasladaron un cajón fúnebre con las banderas de Atlanta y de Israel, acompañado de humo negro, generando un ambiente de provocación y hostilidad.
La situación se agravó en el transcurso del encuentro, cuando desde la tribuna de los seguidores de All Boys se lanzó un dron que sobrevoló la cancha portando una bandera de Palestina, en una clara manifestación política y de apoyo a una causa que ha generado protestas en diferentes países.
Las acciones hostiles no solo quedaron en lo simbólico; durante el partido, los hinchas desplegaron un pasacalle que decía “Muerte al Estado genocida de Israel” y repartieron nuevos panfletos con contenido antisemita.
Este tipo de comportamientos no son incidentes aislados, sino que se han repetido en encuentros pasados, reflejando un patrón de intolerancia en ciertas parcialidades.
Hace aproximadamente un año, en un hecho similar, cinco socios del club All Boys fueron detenidos por portar ataúdes y por corear diferentes consignas discriminatorias.
Entre ellos, el hincha Gastón Panzini, de 45 años, que en ese momento lideraba la protesta con un ataúd que llevaba pintados los colores del club y la bandera israelí.
La Justicia y los órganos deportivos respondieron rápidamente mediante sanciones, incluyendo derechos de admisión que impiden a los sancionados acceder a los estadios por varios años.
El Comité de Seguridad en el Fútbol de la Ciudad de Buenos Aires aplicó medidas disciplinarias
El Comité de Seguridad en el Fútbol de la Ciudad de Buenos Aires aplicó medidas disciplinarias, que incluyeron sanciones económicas, prohibiciones temporales y campañas contra la discriminación, en un esfuerzo por erradicar estos hechos del deporte.
Panzini fue sancionado con una prohibición de asistir a eventos deportivos por cuatro años. Por su parte, otros hinchas como Claudio Ojeda, Lucas Calbanese, Gustavo del Canto y Leonardo Di Lorenzo recibieron penas de hasta un año, próximas a cumplirse, que aún mantienen la vigilancia sobre sus actividades dentro de los eventos deportivos.
Estos sucesos ponen en evidencia la necesidad de seguir fortaleciéndose en políticas de tolerancia y seguridad en el #fútbol argentino y de promover valores que fomenten la inclusión y el respeto, evitando que los shows de odio y violencia empañen la pasión por el deporte.