El exjugador argentino vuelve a su país para asumir como director técnico de Boca Juniors tras su paso por Chivas de Guadalajara.

Fernando Gago cierra un capítulo en su carrera y regresa a Argentina para asumir como director técnico de Boca Juniors.

Este domingo, acompañado de su esposa actual y los hijos de ella, partió desde Guadalajara con destino al Distrito Federal de México y luego tomó un vuelo directo a Buenos Aires.

La llegada está programada para última hora del mismo día, marcando el inicio de una nueva etapa llena de desafíos.

El exfutbolista de la selección argentina ha dejado atrás las críticas tras su salida de Chivas.

Gago ejecutó la cláusula de rescisión para abandonar el club mexicano, lo que implicó un desembolso de aproximadamente 1.500.000 dólares, equivalentes a cerca de 1.400.000 euros.

Esta decisión no ha estado exenta de controversia, ya que algunos analistas consideran que su desempeño en México fue insuficiente, señalando que no logró vencer a los principales rivales de la Liga MX.

Ahora, el exmediocampista iniciado en Boca tendrá que lidiar con las expectativas que genera su regreso.

El primero de los pasos administrativos desde su llegada a Argentina implica la firma de un contrato que se extenderá hasta diciembre de 2025, con la posibilidad de renovación por un año adicional.

Se espera que su presentación oficial como DT se realice en horario por confirmar, pero el primer gran desafío está programado para el lunes a las 17:00, cuando junto a su cuerpo técnico se presente ante el plantel en el complejo de Ezeiza.

Gago no cuenta con tiempo para perder.

Su debut como director técnico de Boca está fijado para el sábado 19, en un partido contra Tigre, que se encuentra en una posición complicada en la tabla de la Liga Profesional.

En esta intensa etapa, el equipo disputará seis partidos en apenas 23 días, lo que significa que deberá definir rápidamente su esquema y once titular tras solo cuatro o cinco sesiones de entrenamiento.

Además, la primera gran prueba del ciclo de Gago será en los cuartos de final de la Copa Argentina contra Gimnasia y Esgrima La Plata, programada para el 23 de noviembre, un duelo crucial que puede abrir la puerta a la clasificación para la próxima Copa Libertadores.

La competencia interna es feroz, y los hinchas de Boca esperan resultados inmediatos, lo que añade una presión considerable al nuevo entrenador.

Desde su llegada, Gago enfrenta un plantel que se ha mantenido en forma, ya que los jugadores han realizado sesiones dobles de entrenamiento en los últimos días.

Sin embargo, la sombra de su excompañero, Sergio Romero, quien no cuenta con el beneplácito de los hinchas, podría complicar su gestión.

En este frenético comienzo, Gago también tendrá la oportunidad de manejar la situación de algunos jugadores que, por diferentes razones, no han sido tenidos en cuenta por el cuerpo técnico anterior.

Las expectativas sobre su gestión son altas, no solo debido a su historia con el club, donde fue un referente como jugador, sino también por el contexto profesional que lleva consigo.

Boca, actualmente situado a 12 puntos del líder Vélez y con 15 puntos en disputa, aguarda una pronta mejora en su rendimiento para luchar por el título de la Liga Profesional y recuperar su estatus en el fútbol argentino.

El camino hacia el éxito puede ser complicado, pero el legado de Gago como jugador inspira a los hinchas a mantener la esperanza en esta nueva era.