En el minuto 51 del segundo tiempo se desarrollaba un partido emocionante en el estadio de Avellaneda.

El árbitro Yael Falcón Pérez decidió no expulsar a Lucas Rodríguez, jugador de Independiente, después de revisar la jugada en el VAR, lo que provocó el enojo de los hinchas presentes.

A pesar de los empujones y alientos de los seguidores del Rojo, el equipo dirigido por Carlos Tévez no logró empatar el partido, que finalizó 3-1 a favor de Talleres de Córdoba.

El gol de Ramón Sosa desde la mitad de la cancha fue el punto culminante de un partido lleno de emociones.

A pesar de ser apenas la primera fecha de un torneo largo de 27 jornadas, Independiente no logra encontrar la calma.

Tras quedar eliminados en la Copa de la Liga, los hinchas mostraron su descontento con el presidente del club, Néstor Grindetti, y con los jugadores.

El próximo desafío del Rojo será enfrentar a Platense el domingo a las 15:30, en busca de una victoria que les permita iniciar una recuperación en la Liga Profesional de Fútbol (LPF).