Alexander Medina se une a un selecto grupo de entrenadores que han logrado derrotar a Marcelo Gallardo en varias ocasiones, consolidando su reputación en el fútbol argentino.
Alexander Medina se ha convertido en uno de los entrenadores que más dificultades presenta para Marcelo Gallardo, el célebre técnico de River Plate.
Con la victoria lograda recientemente, el uruguayo se encuentra en un grupo exclusivo junto a Diego Cocca, Gabriel Milito, Ricardo Zielinski y Eduardo Domínguez, cada uno de los cuales ha logrado vencer a Gallardo en tres ocasiones.
En esta contienda, Medina no estuvo presente en el banco de suplentes, ya que su ayudante Fernando Machado lo reemplazó debido a una severa suspensión de cuatro partidos.
Esta sanción fue impuesta tras una explosiva reacción del entrenador contra el árbitro Yael Falcón Pérez durante el partido contra Rosario Central, donde Medina fue penalizado por "agravios al árbitro y una actitud desmedida". A pesar de su ausencia física, Medina pudo dirigir a su equipo de manera efectiva desde la distancia, utilizando una estrategia planificada a lo largo de la semana previa al enfrentamiento.
La primera victoria de Medina sobre Gallardo data de 2019, cuando dirigía al Talleres y su equipo sorprendió a River Plate con un gol que les permitió ganar 1-0 en el icónico Estadio Monumental.
Esta victoria fue en un partido correspondiente a la Superliga de Argentina.
Posteriormente, el uruguayo hizo lo mismo con Vélez Sarsfield, cuando eliminó a River de la Copa Libertadores en 2022, tras ganar el partido de ida en Liniers y empatar el de vuelta en Núñez, con un polémico gol anulado.
Sin embargo, existe una notable historia detrás de esta rivalidad, marcada por una profunda amistad y respeto mutuo entre ambos entrenadores.
Desde sus días juntos en Nacional de Montevideo, donde Medina era jugador y Gallardo su entrenador, se cimentó una fuerte relación.
Medina ha compartido en varias entrevistas cómo Gallardo lo apoyo durante una difícil lesión, indicándole que lo primordial era su recuperación y no apresurarse a regresar.
Este gesto quedó grabado en la memoria del uruguayo y es una muestra de la camaradería que tenían.
La transición en el papel de Medina ha dado pie a que lo llamen el “discípulo” de Gallardo, un apodo que podría ser discutido considerando el nivel competitivo que ha alcanzado.
No obstante, es innegable que su táctica y enfoque del juego lo han convertido en un auténtico desafío para el entrenador de River.
De hecho, sus triunfos recientes sobre Gallardo han hecho que Medina sea visto como un dolor de cabeza constante para su antiguo mentor, manteniendo el interés en sus enfrentamientos a medida que ambos continúan sus carreras en este apasionante mundo del fútbol argentino.
Este tema se evidenció en su último encuentro, donde el equipo de Talleres volvió a imponerse, reafirmando la capacidad de Alexander Medina para dirigir y gestionar un plantel competitivo que está a la altura de las exigencias del fútbol profesional.
Así, persiste la pregunta: ¿será Medina el único alumno que logre hacer sombra al ilustre Gallardo en el fútbol argentino?