El debut de Boca y River en el Mundial de Clubes mostró diferentes sensaciones tanto en el rendimiento en cancha como en la aceptación del público en Estados Unidos. Boca empató contra Benfica en Miami y tuvo mayor cobertura televisiva, mientras que River ganó en Seattle con menor audiencia. Ambos equipos enfrentan desafíos en su camino hacia el título mundial.

Boca Juniors y River Plate, históricos rivales del fútbol argentino, debutaron en esta competencia en escenarios distintos, enfrentando rivales y con resultados que reflejan realidades variadas.
Boca, que jugó en Miami en el Hard Rock Stadium, empató 2-2 ante el Benfica, un equipo europeo con dos argentinos en sus filas, Ángel Di María y Nicolás Otamendi.
La presencia del equipo portugués incrementó el interés en su enfrentamiento, y la convocatoria fue significativa, con 55.574 espectadores en las gradas. La cobertura televisiva en Argentina mostró un alto nivel de interés, alcanzando un rating promedio en Telefé de aproximadamente 34,3 puntos, mientras que en plataformas como DSports, Disney+ Premium y DAZN, también se transmitió el match.
El buen rendimiento de Boca en su debut puede atribuirse en parte a que el partido se disputó en horario favorable, a las 19:00 hora local, y en un día feriado en Argentina, lo que favorece la audiencia.
Además, la afluencia de público fue mayor en comparación con la de River. El equipo xeneize mostró un rendimiento alentador, logrando un empate que mantiene viva la ilusión de clasificación en la fase de grupos, que continuará con enfrentamientos contra Bayern Múnich y Auckland City.
Por otro lado, #River Plate se impuso con autoridad a Urawa Red Diamonds de Japón, venciendo 3-1 en Seattle ante 11.974 espectadores en el Lumen Field. El equipo de Marcelo Gallardo dominó el encuentro con goles de cabeza de Colidio, Driussi y Maxi Meza, demostrando un rendimiento sólido y cumpliendo con las expectativas de los hinchas y seguidores en Argentina.
En contraste con Boca, la audiencia televisiva en Argentina para el partido de River fue menor, con un rating promedio de 21,6 en Telefé. Esto puede atribuirse en parte a que el juego se disputó en un horario similar, pero en un día laborable, y en un estadio con menor capacidad, lo que también influyó en la presencia y en la percepción del interés en esta modalidad de competencia.
El próximo desafío para Boca será enfrentarse al Bayern Múnich en Miami, en un partido que se jugará el viernes 20 de junio a las 22:00 hora argentina.
Los bávaros, dirigidos por Vincent Kompany, llegan como campeones de la Bundesliga y con una goleada histórica de 10-0 ante Auckland City en su debut.
La historia del club alemán en competencias internacionales es vasta, y este equipo es considerado uno de los grandes favoritos al título en esta edición.
Por su parte, River tendrá su segundo partido ante Monterrey, en Los Ángeles, el sábado 21 de junio a las 22:00. Los mexicanos vienen de disputar su primer encuentro contra Inter de Milan; aunque no han tenido un inicio sobresaliente en la Liga MX, lograron clasificarse tras ganar la Concachampions en 2021.
La victoria en Seattle coloca a River en una buena posición para avanzar a octavos, aunque deberán enfrentar a rivales de alto nivel en una fase que tradicionalmente es muy competitiva.
El #Mundial de Clubes ha sido escenario de muchas sorpresas y momentos memorables
Históricamente, el Mundial de Clubes ha sido escenario de muchas sorpresas y momentos memorables. Desde la primera edición en 2000, la competencia ha evolucionado en formato y participantes, integrando a los campeones de cada continente. La participación de equipos como Boca y River en diferentes épocas ha contribuido a elevar el interés internacional, ganando reconocimiento y alma en los torneos globales.
En resumen, las dos instituciones argentinas iniciaron con resultados positivos y desafíos por delante. La percepción del público y las audiencias televisivas en #Estados Unidos reflejan el interés que despiertan, aunque con diferencias en alcance y expectativas.