El segundo semestre en el fútbol argentino inicia con diversas competencias, desafíos económicos y deportivos, en un contexto de transición tras el Mundial de Clubes y con dificultades en la organización y distribución de recursos. Los equipos se preparan para un semestre lleno de emociones y decisiones clave.

Tras la finalización del primer semestre, marcado por la celebración del campeonato conquistado por Platense en el Torneo Apertura, ahora los equipos se preparan para una segunda parte cargada de competencias, decisiones administrativas y retos económicos.
El inicio oficial de esta etapa será el martes 8 de julio, con la disputa de la Supercopa Internacional 2024, un torneo que, pese a llamarse internacional, se jugará en Avellaneda y enfrentará al ganador del Trofeo de Campeones, Estudiantes, contra el mejor de la tabla anual, Vélez.
Aunque la copa lleva esa denominación, pertenece al calendario de torneos nacionales y su ganador será considerado campeón oficial del fútbol argentino.
Este torneo, junto con la Supercopa Argentina 2024, en la que se enfrentará Vélez y Central Córdoba el 6 de septiembre, marcarán el inicio de un goteo de competencias que ofrecerán emoción y momentos decisivos hasta fin de año.
Otra de las competiciones estelares será la Copa Argentina, que además de ser un torneo de gran prestigio, otorga un cupo directo a la fase de grupos de la #Libertadores 2026.
El torneo, que concluirá en noviembre, reúne a diferentes equipos del #fútbol argentino en un certamen que siempre genera expectativa y sorpresas, además de ser un escenario de oportunidad para clubes de menor categoría.
Para diciembre, en principio el sábado 20, se tiene previsto la disputa del Trofeo de Campeones, una final que enfrentará al campeón del Torneo Clausura, que inicia en julio, contra el ganador de la misma temporada.
En esta ocasión, Estudiantes de La Plata, quien venció a Vélez en la edición pasada, tendrá la oportunidad de revalidar su título.
El torneo Clausura, que comenzará el viernes 11 de julio, tendrá un formato similar al del Apertura, con dos zonas de 15 equipos cada una, en una modalidad de una sola rueda.
Cada club disputará 14 partidos contra rivales de su zona, además de un clásico interzonal y un encuentro adicional sorteado, totalizando 16 fechas.
Luego de la fase regular, los ocho mejores de cada grupo avanzarán a una fase de eliminación directa, que culminará con la gran final prevista para diciembre.
En caso de empates en los 90 minutos, las instancias de playoff incluirán tanda de penales, excepto la final, que tendrá prolongación y remates desde el punto penal.
Uno de los temas en la agenda del próximo jueves será la reunión del Comité Ejecutivo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA)
En el aspecto administrativo, uno de los temas en la agenda del próximo jueves será la reunión del Comité Ejecutivo de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA), donde se analizarán situaciones relacionadas con los ascensos y descensos, además de las tablas de posiciones y promedios que determinarán quiénes perderán su plaza en la máxima categoría.
La tabla general, que suma los puntos obtenidos en el Apertura y el Clausura, también será clave para definir futuras clasificaciones a competencias internacionales, además de determinar el descenso.
Actualmente, los clubes que atraviesan mayores dificultades en la lucha por evitar el descenso son San Martín de San Juan y Talleres de Córdoba, que ocupan los últimos puestos en la tabla de promedios y en la clasificación general, respectivamente.
Vélez, que en la temporada pasada fue subcampeón del torneo, ha sumado un punto más en esta tabla y busca evitar su caída después de un inicio de año complicado.
En el plano deportivo, River Plate y Boca Juniors centraron su atención en sus máximas competencias internacionales, la Libertadores y la Sudamericana.
River, tras su papelón en el Mundial de Clubes, enfoca sus esfuerzos en avanzar en los octavos de final de la Libertadores, mientras que Boca apuesta por obtener buenos resultados en el #Clausura y en la Copa Argentina.
Otros equipos como Racing, Estudiantes y Vélez también se preparan para estos retos. Por su parte, clubes como Central Córdoba, Independiente, Lanús, Godoy Cruz y Huracán lucharán en las copas internacionales, buscando alcanzar etapas avanzadas que les aseguren recursos y reconocimiento.
A pesar de la intensa actividad y la variedad de competencias, el fútbol argentino enfrenta fuertes críticas debido a diversos problemas internos, como la falta de distribución equitativa de ingresos, premios insuficientes, un exceso de equipos, que actualmente suman 30, y un calendario apretado que dificulta la planificación y el descanso de los jugadores.
Además, la organización del fútbol local ha sido objeto de cuestionamientos por su influencia en la economía de los clubes y la sostenibilidad del torneo.
En conclusión, el segundo semestre de 2024 será un período decisivo para el fútbol argentino, que busca mantener su competitividad, recuperar su credibilidad y ofrecer un campeonato que motive a sus seguidores.
A pesar de los obstáculos, los aficionados podrán disfrutar de una serie de partidos trascendentales que definirán campeones, descensos y futuras participaciones internacionales.