El piloto de Red Bull, Max Verstappen, logra una victoria notable en el Gran Premio de China, marcando su primer triunfo en este circuito tras cinco años de ausencia por la pandemia.
El Gran Premio de China de 2024, tras la ausencia forzada por la pandemia durante los últimos cinco años, ha regresado con una brillante actuación de Max Verstappen, quien conquistó la victoria de manera aplastante, sacando nada menos que 14 segundos de ventaja a su más cercano competidor, Lando Norris.
Este triunfo no solo representa un hito para Verstappen, sino que también pone en el centro de atención a McLaren, equipo que busca restaurar su gloria en la Fórmula 1 tras años de desafíos.
Lando Norris, quien este mismo día competirá nuevamente en el circuito de Shanghai, apunta a romper una racha de 27 años sin conseguir la hazaña de tres triunfos consecutivos para McLaren, un logro que solo ha sido alcanzado por Mika Hakkinen en 1998.
El piloto inglés, de 25 años, llega a esta carrera después de dos impresionantes victorias en Abu Dhabi y Australia, deseoso de repetir la hazaña del legendario finlandés.
Durante la última carrera en el circuito de Albert Park, Norris logró romper el antiguo récord de triunfos de dos en fila establecido por Lewis Hamilton, quien había sido el último en lograrlo en 2010.
Hamilton, que ha tenido un comienzo difícil con Ferrari, cuenta con el récord de victorias en Shanghai, habiendo ganado seis veces en este trazado que fue inaugurado en 2004.
El Gran Premio de China se remonta a 2003, cuando la idea de construir un autódromo en Shanghai se llevó a cabo sobre un terreno pantanoso. Con una inversión de 450 millones de dólares, la construcción del circuito se finalizó en apenas dieciocho meses. Este trazado, diseñado por el ingeniero Hermann Tilke, es conocido por su complejidad y por sus curvas que evocan el símbolo del yin-yang, convirtiéndolo en uno de los más desafiantes del calendario de Fórmula 1.
A pesar de la victoria de Verstappen, el récord del circuito establecido por Michael Schumacher en su inauguración permanece intacto. Schumacher marcó el giro más rápido durante ese fin de semana, un logro que aún se busca superar. No obstante, el circuito ha presentado cambios; el asfalto ha sido recientemente renovado, lo que en el pasado ha generado problemas de degradación para los neumáticos.
El trazado, que se extiende por 5.451 kilómetros, ha sido recompensado con diversas etapas de DRS que permiten a los pilotos maximizar la velocidad en las zonas más largas. Sin embargo, el primer día de competencia suelen ser complicadas debido a la suciedad del circuito, lo que aumenta la incertidumbre para los pilotos que necesitan adaptarse rápidamente.
Franco Colapinto, siendo el piloto reserva de Alpine, también ha estado presente, preparado para apoyar a su equipo frente a posibles eventualidades.
Colapinto, quien debutó el año pasado con Williams, está listo para intervenir si se presenta la necesidad de sustituir a algún piloto durante la carrera.
El diseño del circuito y la historia que lo acompaña, junto a la esperada competencia de los mejores pilotos del mundo, hacen del Gran Premio de China una cita obligada en el calendario de la Fórmula 1.
Los aficionados podrán disfrutar de la carrera que promete ser emocionante y llena de sorpresas, tanto el sábado con la Carrera Sprint como el domingo con la carrera principal.
