El piloto argentino Franco Colapinto se sobrepuso a las extremas condiciones climáticas durante su participación en el Gran Premio de Singapur, mostrando un desempeño notable a pesar de los obstáculos.

El Gran Premio de Singapur, celebrado el pasado fin de semana en el icónico circuito de Marina Bay, se presentó como una de las mayores pruebas para los pilotos de Fórmula 1, y Franco Colapinto no fue la excepción.

A pesar de su breve tiempo de preparación, el piloto argentino tuvo que enfrentarse a un calor extremo que complicó su actuación en la carrera.

Singapur es conocido por ser un circuito que exige mucho tanto física como mentalmente a los competidores.

La escudería Williams ha implementado un programa de preparación específico para este evento, aprovechando las instalaciones de la Universidad de Westminster en Londres.

Allí, los pilotos están acondicionados en un laboratorio de entrenamiento que simula las cálidas temperaturas y la alta humedad del circuito.

Un elemento crucial de este entrenamiento es una bicicleta fija ubicada en una cámara que puede regular la temperatura.

Allí, los pilotos entrenan con condiciones similares a las que experimentan en Singapur, alcanzando temperaturas de hasta 34 grados Celsius y un alto nivel de humedad.

Sin embargo, Colapinto, quien llegó a este evento con solo unas semanas de preparación, enfrentó serias dificultades para adaptarse adecuadamente a tales condiciones.

El clima en el día de la carrera era despiadado, con temperaturas ambiente que alcanzaron los 34 grados, pero la sensación térmica en la pista podía superar los 40 grados.

Colapinto compartió su experiencia post carrera, expresando que la bebida que consumió durante la competencia le provocó malestar estomacal.

"Hacía mucho calor, y el azúcar de la bebida caliente mezclada con el calor fue una combinación complicada para el cuerpo", comentó el argentino.

A pesar de estas adversidades, el rendimiento de Colapinto fue notorio, terminando la carrera a solo una posición de obtener puntos, lo cual es digno de mención.

Sin embargo, no fue el único piloto que padeció las exigentes condiciones.

George Russell y Lewis Hamilton de la escudería Mercedes tuvieron que ausentarse de la rueda de prensa tras la carrera debido a problemas de sobrecalentamiento.

Según el jefe del equipo, Toto Wolff, ambos pilotos se recuperaron rápidamente.

Lando Norris, quien salió victorioso de la carrera, también admitió haber experimentado efectos negativos tras cruzar la meta, y Nico Hulkenberg reveló haber perdido alrededor de 3 kilogramos debido a la intensa sudoración.

El Gran Premio de Singapur es a menudo considerado el recorrido más demandante del calendario de la F1. De forma similar, el próximo Gran Premio de Abu Dhabi, que cerrará la temporada, también presenta condiciones climáticas extremas.

Para enfrentar esos retos, Colapinto tendrá más tiempo para entrenar y aclimatarse a estas condiciones adversas, buscando un mejor rendimiento en su próximo desafío en el Gran Premio de Estados Unidos, programado para el 20 de octubre.

La capacidad de los pilotos para adaptarse y superar las adversidades en la Fórmula 1 es fundamental, y el equipo de Williams continúa trabajando para asegurar que sus corredores estén preparados para las exigencias de cada circuito.