El esquiador francés Cyprien Sarrazin, que había registrado el mejor tiempo en las pruebas previas, sufrió un grave accidente durante el segundo entrenamiento para el descenso de Bormio, una competición que forma parte de la Copa del Mundo de esquí alpino y que tiene lugar en la estación italiana.

Sarrazin, de 30 años y con un palmarés que incluye cinco victorias en la Copa del Mundo, una de ellas en esta misma pista el año anterior, perdió el control mientras descendía a gran velocidad y se fue descontrolado al abordar un salto en la parte inferior de la dificultad helada de la pista Stelvio.

En el impacto, sufrió lesiones significativas en la cabeza y la espalda, además de romper la red de seguridad con uno de sus esquís.

El accidente ha sido calificado de grave, pues las imágenes de la caída muestran cómo el esquiador se deslizó sin control sobre la nieve después de perder la estabilidad.

Fue necesario evacuarlo en helicóptero a un centro hospitalario cercano, donde la Federación Francesa de Esquí confirmó que Sarrazin había sufrido un hematoma subdural, un tipo de hemorragia que se presenta entre las meninges, posiblemente causado por un traumatismo craneal severo.

Debido a la seriedad de su estado, se informó que el esquiador fue ingresado en la unidad de cuidados intensivos y que requería una intervención quirúrgica durante el día del accidente.

Este evento ha conmovido no solo a sus compañeros de competencia sino también a toda la comunidad del esquí, que ha expresado su preocupación por la salud del deportista.

Durante el mismo ensayo, otro esquiador, el suizo Josua Mettler, también sufrió un accidente en la misma sección donde ocurrió la caída de Sarrazin, lo que refleja la peligrosidad de la pista y las condiciones adversas que enfrentan los atletas en competiciones de alto nivel.

En el marco de estos eventos, el canadiense Alexander Cameron se destacó al finalizar la sesión con el mejor tiempo, cubriendo los 3.442 metros de la desafiante pista Stelvio en 1 minuto, 55 segundos y 13 centésimas.

Este tiempo lo colocó en la cima de las clasificaciones, quedando muy por delante del suizo Stefan Rogentin, que registró un tiempo 53 centésimas mayor.

Los descensos en esta pista comenzaron a ser un referente en el circuito de la Copa del Mundo desde su diseño original en los años 60, y a lo largo de las décadas han sido escenario de victorias memorables así como de accidentes lamentables, subrayando los riesgos que entrañan los deportes de invierno.

El futuro inmediato del esquiador se mantiene incierto, mientras los fans y la comunidad del esquí aguardan actualizaciones sobre su estado de salud.