El esgrimista argentino tuvo un buen inicio en los Juegos Olímpicos de París 2024, pero fue eliminado en la segunda ronda por el número uno del mundo.
Pascual Di Tella, esgrimista argentino de 28 años, ha dejado huella en su debut olímpico en los Juegos de París 2024 con una victoria destacada, aunque su camino se detuvo en la siguiente ronda ante el egipcio Ziad Elsissy, actual número uno del mundo.
Di Tella abrió su participación en el torneo de sable individual masculino con un emocionante combate contra el canadiense Francois Cauchon, donde logró imponerse con un ajustado marcador de 15-13.
El encuentro con Cauchon fue un reflejo de la tenacidad que caracteriza a Di Tella, quien tuvo que luchar desde un marcador adverso de 11-13 en el cierre de la contienda.
Su capacidad de reacción fue clave, y alcanzó la victoria en los momentos decisivos.
Sin embargo, en la segunda ronda se enfrentó a un reto mayor.
A pesar de un inicio prometedor en el que logró igualar la puntuación a 11-11 contra Elsissy, el egipcio aprovechó su experiencia y se llevó la victoria por 15-11. Durante el combate, Di Tella se sintió frustrado por diversas interrupciones y tácticas del egipcio, lo que, según él, le restó fluidez a su actuación.
"Estuve ahí, once iguales, y se me escapó en el final.
Cuatro puntos fueron para él", expresó en una entrevista con TyC Sports, visiblemente decepcionado por el resultado.
El Grand Palais de París, un escenario emblemático para los Juegos Olímpicos, fue testigo de la actuación de Di Tella, quien no solo se destaca en la esgrima, sino que también comparte su pasión por la música.
A pesar de la eliminación, el deportista se lleva consigo la experiencia de haber comenzado su carrera olímpica con una victoria significativa.
"No voy a protestar, porque está todo dentro de las reglas, más o menos... Pero él es un tipo muy mañoso", indicó, refiriéndose a las tácticas de su contrincante.
Di Tella reflexionó sobre su actuación y manifestó que, aunque sintió que podría haber avanzado más en el torneo, guarda la esperanza de que en los próximos Juegos Olímpicos, que se llevarán a cabo en Los Ángeles, pueda mostrar su mejor versión.
Cabe destacar que Pascual Di Tella no es ajeno al mundo olímpico.
Su familia ha estado presente en competencias internacionales: su padre, Rafael, fue un destacado esgrimista que participó en los Juegos de Seúl 1988 y Barcelona 1992, mientras que su madre, Astrid Stevelinck, compitió en esquí alpino en Calgary 1988 y Albertville 1992. Este legado familiar añade un significado especial a la carrera de Pascual, quien continúa marcando pasos en la historia olímpica de Argentina.