El partido entre Barracas Central y San Miguel en la Copa Argentina generó polémica por una jugada no sancionada como penal, que influyó en el resultado final.
Todos los encuentros de Barracas Central se encuentran siendo examinados minuciosamente.
Y el desenlace del tiempo reglamentario este miércoles frente a San Miguel en los dieciseisavos de final de la Copa Argentina tampoco fue la excepción.
El equipo de la Liga Profesional tuvo que recurrir a la definición por penales, donde se destacó una controversia que rápidamente inundó las redes sociales: todo el 'Trueno Verde', su contrincante de la Primera Nacional, reclamó un penal en una jugada al final del partido que no fue pitado.
Sucedió a los 86 minutos en el estadio Alfredo Beranger de Temperley la situación polémica: Catriel Sánchez se hizo con el balón en la salida del conjunto porteño y, al adentrarse en el área, recibió un empujón por detrás de Alex Juárez.
El árbitro Gariano no consideró que fuera falta.
Después, Barracas Central tuvo un 100% de efectividad en los penales y eliminó a San Miguel en el estadio Alfredo Beranger.
Tras un empate sin goles en los 90 minutos, el equipo dirigido por Alejandro Orfila no dejó pasar su oportunidad, el arquero Marceli Miño brilló cuando tuvo que hacerlo y consiguió la clasificación a los octavos de final, donde se enfrentará a Rosario Central.
El empate a cero al finalizar la primera mitad solo se puede explicar por la falta de eficacia de ambos equipos en los metros finales.
Barracas Central dispuso de dos ocasiones con su goleador Ramón Ábila, que falló en momentos clave frente a Joaquín Pucheta.
Por su parte, San Miguel, más replegado y con la clara intención de defender en cada contragolpe, careció de profundidad en los metros decisivos y no estuvo acertado a la hora de definir en la portería rival.
La segunda mitad en el estadio Alfredo Beranger transcurrió sin muchos cambios.
Barracas Central mantuvo el control del balón y tuvo algunas oportunidades para abrir el marcador y evitar los penales, que finalmente fueron la resolución.
Por parte de San Miguel, lo mejor llegó de la mano de Nahuel Luján, siempre incisivo y comprometido para liderar los ataques de su equipo pese a la falta de eficacia en la definición ante el arquero rival.
San Miguel inició la tanda de penales con fuerza y determinación, pero Facundo Melivilo, exfinalista con Central Córdoba de Santiago del Estero en 2019, erró su disparo y su esperanza comenzó a desvanecerse.
En cambio, Barracas Central acertó en cada lanzamiento y Marcelo Miño se lució en momentos clave para otorgarle la clasificación a su equipo.
Barracas avanzó con emoción y continúa en competencia en ambas copas.