El exjugador de cricket inglés Wayne Larkins, conocido por su carácter carismático y su talento en el campo, ha fallecido a los 71 años en Coventry. Su legado en el cricket internacional y doméstico deja una huella imborrable en el deporte.

Larkins, quien era cariñosamente conocido como 'Ned', falleció en Coventry a la edad de 71 años después de una breve enfermedad en el Hospital Universitario de Coventry.
La noticia fue confirmada por la Junta de #Cricket de #Inglaterra y Gales (ECB), que expresó su pesar y rindió tributo a su legado.
Supuestamente, Larkins fue un jugador destacado en la selección inglesa en las décadas de 1980 y principios de los 90, participando en 13 pruebas de formato largo y en 25 partidos de One Day International (ODI) entre 1979 y 1991.
Su participación en la final de la Copa del Mundo de 1979, enfrentando a Inglaterra contra las Indias Occidentales, es uno de sus momentos más recordados.
Aunque la selección inglesa perdió aquel encuentro, la actuación de Larkins fue siempre valorada por su agresividad al bate y su personalidad vibrante.
Uno de los momentos más emblemáticos de su carrera ocurrió en 1990 en Sabina Park, cuando logró anotar las carreras que aseguraron una importante victoria para Inglaterra sobre las Indias Occidentales en un test que aún se recuerda en la historia del cricket internacional.
Su estilo de juego, caracterizado por golpes poderosos y una presencia imponente en el campo, le valió el respeto de compañeros y aficionados.
929 carreras en el cricket de clubes y ligas menores
A nivel doméstico, Larkins acumuló un total de 29,929 carreras en el cricket de clubes y ligas menores, jugando para Northamptonshire en más de 700 partidos y logrando 60 centuries a lo largo de su carrera.
Además, fue capitán del equipo en varias ocasiones, demostrando liderazgo y compromiso en el deporte. Posteriormente, también defendió los colores de Durham, dejando una huella significativa en ese equipo y en la liga inglesa.
Su impacto fuera del campo también fue notable. Supuestamente, era conocido por su humor contagioso y su carácter amistoso, cualidades que lo convirtieron en una figura querida en el mundo del cricket.
La esposa de Larkins, Debbie, expresó en un comunicado que su esposo amaba a todos los que conocía y que su energía positiva iluminaba cualquier lugar.
“Supuestamente, Wayne disfrutaba de la vida y del deporte, y siempre buscaba alegrar a quienes estaban a su alrededor. Aunque estamos devastados, su espíritu vivirá en nuestras memorias y en el legado que dejó”, afirmó.
El cricket inglés y sus seguidores en todo el mundo recuerdan a Wayne Larkins no solo por sus logros deportivos, sino también por la alegría y el entusiasmo que transmitía en cada partido.
La comunidad deportiva continúa rindiendo #homenaje a su figura, y se espera que en los próximos días se realicen ceremonias para honrar su memoria.