La selección argentina de Copa Davis no pudo avanzar a las semifinales tras una emocionante serie contra Alemania en Bologna, que se decidió en un vibrante duelo de dobles. Los argentinos pelearon hasta el final, pero la suerte estuvo del lado de los europeos en un partido definido en el último momento.
La serie frente a #Alemania fue tan peleada y emocionante como se anticipaba, llena de idas y vueltas, hasta el último punto que definió el destino de ambos equipos.
El encuentro se caracterizó por la tensión y la intensidad en cada juego, con los jugadores argentinos mostrando un nivel muy alto en un contexto de gran presión.
En el primer día de enfrentamientos, Tomás Etcheverry, ubicado en el puesto 60 del ranking mundial, se impuso con autoridad en su partido contra Jan-Lennard Struff, del 84, en sets de 7-6 (7-3) y 7-6 (9-7).
El tenista platense, que había enfatizado la importancia de mantener la calma y confiar en sus golpes, logró un rendimiento excepcional, incluyendo la ejecución de siete aces consecutivos en el segundo set, un récord que sorprendió tanto a él como a sus rivales.
Esa victoria inicial colocó a #Argentina en ventaja, esperando consolidar su desempeño con una actuación sólida en el segundo duelo del día. Sin embargo, en ese segundo encuentro, Alexander Zverev demostró por qué es uno de los mejores del circuito, venciendo a Francisco Cerúndolo por 6-4 y 7-6 (7-3).
El alemán, con una experiencia vasta en torneos grandes, supo aprovechar los momentos clave, como un bache en el juego del argentino y un sólido comienzo en el tie-break del segundo set, para igualar la serie.
El escenario más emocionante se vio en el dobles, donde Argentina contó con Zeballos, número cinco del mundo y reciente campeón en Roland Garros y el US Open, junto a Molteni, en el puesto 21 del ranking.
Su rival, en cambio, fue la dupla alemana compuesta por Tim Puetz y Kevin Krawietz, una pareja que acumula 19 triunfos en esas categorías y solo una derrota en lo que va de la temporada.
El partido de dobles fue una verdadera montaña rusa, con cada set muy igualado y momentos decisivos que pudieron haber inclinado la balanza para cualquiera de los lados.
Después de casi dos horas de juego, el resultado aún permanecía abierto. La tensión creció en el último set, en un lapso donde ambos equipos tuvieron oportunidades de cerrar la serie.
Esa jugada fue la clave que selló la victoria para Alemania por 4-6
Todo se decidió en el último punto, cuando Tim Puetz logró un passing shot que, tras la revisión tecnológica, fue confirmado como válido. Esa jugada fue la clave que selló la victoria para Alemania por 4-6, 6-4 y 7-6 (12-10). La derrota fue dura para Argentina, que vio escaparse la posibilidad de acceder a las semifinales en una de las series más reñidas de las recientes ediciones del torneo.
El resultado final dejó a Argentina con un saldo de una victoria y una derrota en los enfrentamientos individuales, mostrando un alto nivel competitivo y el espíritu de lucha de sus jugadores.
La eliminación llegó en una edición que quedará en la memoria por la intensidad y el rendimiento de ambos lados. Como antecedente histórico, hay que recordar que la #Copa Davis siempre ha sido un escenario donde los países dejan en la cancha toda su historia y pasión, y en esta ocasión, Argentina demostró carácter y orgullo hasta el final.
A pesar del trago amargo, los argentinos se despiden con la cabeza en alto, dejando todo en cada punto y mostrando que el talento y la garra no se negocian.
