En una apasionante noche de Champions League se vivió un duelo lleno de emoción entre Arsenal y Bayern Munich.

El equipo inglés logró empatar 2-2 como local ante los alemanes, en un partido marcado por una decisión arbitral discutible que generó controversia.

El árbitro decidió no cobrar un claro penal a favor del Bayern Munich, el cual fue ignorado por el VAR. Esta situación provocó la indignación tanto de jugadores como del DT Thomas Tuchel.

La explicación dada por el árbitro Glenn Nyberg fue considerada por Tuchel como inaceptable.

Nyberg calificó el error del defensor brasileño Gabriel Magalhaes de Arsenal, quien cometió una clara mano en el área, como un 'error infantil' y declaró que no sancionaría dicho error en los cuartos de final de la Champions League.

Esta decisión afectó en gran medida al equipo inglés y provocó un fuerte malestar en el ambiente.

Este incidente recuerda a situaciones similares que han ocurrido en el fútbol mundial, como el penal otorgado a Independiente en Argentina a raíz de una acción idéntica.

La polémica arbitral sigue siendo un tema de debate en el fútbol, incluso en competiciones de alto nivel como la Champions League.

En euros, el costo de las entradas para presenciar este emocionante partido oscila entre 70 y 100 euros, dependiendo de la ubicación en el estadio.

La audiencia televisiva también aumentó significativamente durante este encuentro, demostrando el interés global que genera la Champions League entre los aficionados al fútbol.