El excampeón mundial Dwight Muhammad Qawi falleció a los 72 años tras una larga lucha contra la demencia, dejando un legado inspirador en el mundo del boxeo. Su historia, marcada por la transformación desde sus inicios en prisión hasta la cima de la categoría de peso semipesado, continúa siendo un ejemplo de superación y resiliencia.
Qawi, cuyo nombre real era Dwight Braxton, nació en Baltimore y creció en Camden. Su #historia de vida es considerada una de las más inspiradoras en la historia del deporte. Supuestamente, comenzó a practicar #boxeo mientras permanecía en prisión, específicamente en el penal de Rahway State, donde se encontraba cumpliendo una condena por robo a mano armada.
En ese entorno, supuestamente encontró en el boxeo un medio para cambiar su destino y canalizar su energía.
Tras su liberación en 1978, a la edad de 25 años, decidió dedicarse profesionalmente a la pelea. Rápidamente se hizo conocido en el mundo del boxeo, y en diciembre de 1981, logró uno de sus mayores logros al detener a Matthew Saad Muhammad en la décima ronda para conquistar el título mundial WBC en la categoría de peso semipesado.
Este combate marcó un antes y un después en su carrera, consolidándolo como un campeón respetado y temido en el ring.
Presuntamente, en 1982, después de su conversión al islam, cambió su nombre legalmente a Dwight Muhammad Qawi. Su estilo agresivo y su resistencia lo valieron apodos como “La Lijadora de Camden”. En 1982, también defendió con éxito su título en varias ocasiones, incluyendo una victoria sobre Saad en un combate que supuestamente duró ocho meses después del primero.
Su carrera continuó con altibajos, incluyendo una derrota ante Michael Spinks, pero supuestamente en 1985 ascendió de peso y conquistó el título WBA de peso crucero al vencer a Piet Crous en un combate que duró seis asaltos.
Sin embargo, su reinado en esa categoría fue breve, ya que en julio de 1986 perdió el cinturón ante Evander Holyfield en un combate de 15 asaltos, en el que supuestamente mostró su espíritu competitivo y valentía.
Tras su paso por la categoría crucero, Qawi también peleó en peso pesado, enfrentándose a figuras como George Foreman, quien lo derrotó en siete asaltos.
Fue incluido en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional
Finalmente, en 1998, a los 46 años, anunció su retiro con un récord de 41 victorias, 11 derrotas y 1 empate, con 25 nocauts. En 2004, fue incluido en el Salón de la Fama del Boxeo Internacional, reconociendo su contribución y legado en el deporte.
Después de colgar los guantes, supuestamente se dedicó a entrenar jóvenes y a trabajar como consejero en temas de adicciones, usando su historia de vida para motivar a otros a superar obstáculos.
