Tras meses de esfuerzo y expectativas, Alan Velasco marca su primer gol con Boca Juniors, ayudando al equipo a volver a la senda del triunfo en un partido crucial en Mendoza.

Este monto lo colocó en la élite de los refuerzos más costosos en la historia del club. Sin embargo, los primeros meses en La Bombonera no fueron fáciles para el delantero, quien tuvo que lidiar con altas presiones y un rendimiento que no cumplía con las expectativas.
Desde su llegada en diciembre de 2024, Velasco tuvo una adaptación complicada, participando en diferentes partidos sin lograr aún consolidarse como figura destacada.
La carga de la prensa y las expectativas de los hinchas parecían pesarle en algunos momentos, especialmente tras un penal errado en la serie de cuartos de final de la Copa Argentina contra Alianza Lima, que dejó una sombra en su rendimiento.
No fue hasta este domingo, en un partido vital en Mendoza contra Independiente Rivadavia, que Velasco pudo demostrar que está dispuesto a revertir esa imagen.
Por primera vez en su paso por el club, el técnico Miguel Ángel Russo lo dejó en el banco en el inicio y en el momento más decisivo ingresó en sustitución de un compañero.
La inclusión fue clave, y en el minuto final, Velasco escribió su historia personal con un gol decisivo.
El joven jugador, habilitado por Milton Giménez, tomó el balón por la banda izquierda y, tras una buena embroque con el área rival, definió con precisión al primer palo del arquero, Ezequiel Centurión.
Que aseguró una #victoria que fue celebrada con mucha emoción en el vestuario
Aunque en un primer intento parecía que el arquero lograba detener el remate, la pelota se le escapó y terminó en el fondo de la red. Ese gol significó el 3-0 para Boca, que aseguró una victoria que fue celebrada con mucha emoción en el vestuario.
Este logro adquirió un significado aún mayor, dado que fue el primer tanto de Velasco en su etapa en Boca, después de unos meses difíciles. El jugador no pudo contener la emoción y se fundió en un abrazo con sus compañeros, mientras la grada coreaba su nombre. La expresiones en su rostro reflejaron una mezcla de alegría y alivio, tras una sequía goleadora que se prolongaba desde octubre de 2024, cuando aún militaba en la MLS con FC Dallas.
Su trayectoria con Boca no ha sido fácil. Velasco debutó en el primero de los ocho encuentros que dirigió Russo en su tercer ciclo al frente del equipo. Participó en los partidos del Mundial de Clubes, en los encuentros del torneo local, y en la eliminación en los octavos de final de la Copa Argentina frente a Atlético Tucumán, jugado en Santiago del Estero.
Hasta ese momento, su rendimiento había sido observado con lupa, y cada error o acierto fue analizado por aficionados y medios especializados.
Este gol y la actuación en Mendoza representan un punto de inflexión para Velasco, quien ahora busca consolidarse como una pieza clave en el esquema de Boca.
La victoria no solo aporta confianza al equipo, sino que también al propio jugador, que ahora tiene la oportunidad de demostrar su valía en los próximos encuentros.