El equipo de Diego Martínez no logra mejorar su desempeño fuera de casa, acumulando más de dos meses sin victorias en esta condición, lo que afecta su posición en la liga.
La situación para Boca Juniors no parece mejorar cuando se trata de jugar fuera de casa.
El reciente empate sin goles ante Instituto en Córdoba es un reflejo más de las dificultades que enfrenta el equipo en sus visitas.
El encuentro, que se celebró a lo largo de 90 minutos, mostró a un Boca tímido y carente de ideas, dejando en evidencia su escaso poder ofensivo.
A pesar de ser uno de los clubes más grandes de Argentina, Boca ha tenido un rendimiento decepcionante en partidos como visitante.
El equipo dirigido por Diego Martínez se sitúa actualmente en la mitad de la tabla, lo que le impide acceder a las posiciones que clasifican para la Copa Libertadores 2025. Desde el 19 de mayo, Boca no ha logrado sumar tres puntos fuera de su estadio, ese día sorprendió al Central Córdoba en Santiago del Estero con una victoria por 4-2. Desde entonces, solo ha cosechado empates y derrotas en sus viajes.
La falta de goles ha sido una constante en el desempeño del Xeneize, que ha registrado solo siete triunfos en sus últimos 21 partidos fuera de La Bombonera.
En su estadio, Boca se muestra imbatible, con un saldo de 9 victorias y 3 empates en 12 encuentros, pero la realidad cambia drásticamente cuando deben salir a competir en otros campos.
Durante el primer tiempo en Alta Córdoba, el equipo local fue quien llevó la batuta del juego.
Boca no tuvo la capacidad para generar peligro y únicamente logró inquietar a Instituto en contadas ocasiones.
La presión ejercida por el conjunto local sobre Tomás Belmonte, quien no se encontraba cómodo, obligó a Boca a ceder el control a la defensa rival.
Boca Juniors empata contra Nacional de Potosí en la Copa Sudamericana
Boca Juniors y Nacional de Potosí empataron sin goles en un partido en el que el equipo argentino no logró aprovechar un penal. A pesar del dominio de Boca, la falta de contundencia dejó escapar la oportunidad de comenzar la Copa Sudamericana con una victoria.Un tiro de esquina fue la única acción clara de Instituto durante la primera mitad, que fue salvada por un mal remate de Ignacio Russo.
El arquero Sergio Romero tuvo que intervenir en varias ocasiones para evitar una derrota que, en honor a la verdad, parecía inminente.
Con cada minuto que transcurría, la sensación de que Boca podría sucumbir aumentaba.
En un momento, Santiago Rodríguez estuvo cerca de abrir el marcador, sin embargo, su tiro fue desviado por un compañero que se encontraba en fuera de juego.
Romero brilló con una espectacular atajada que mantuvo la igualdad en el marcador.
Al inicio del segundo tiempo, el técnico Martínez realizó cambios en un intento de revertir la situación.
Sin embargo, los ajustes no terminaron de funcionar.
Boca continuaba siendo ineficaz en su ataque y aún vivía momentos de zozobra en defensa.
La designación del árbitro, Hernán Mastrángelo, fue criticada por no sancionar un claro penal a favor de Instituto, lo que dejó a los locales con un sabor amargo.
A medida que transcurría el partido, el encuentro se tornó más dinámico, pero sin ocasiones claras que quebraran la paridad.
El desasosiego en el aire era palpable para los hinchas de Boca, que ven cómo su equipo navega por aguas turbulentas en esta temporada.
Sin victorias fuera de casa por más de dos meses, el rumbo del equipo se convierte en una preocupación para sus seguidores.