El tenista escocés Andy Murray se perderá su último Wimbledon debido a una lesión en la médula espinal, complicando también su participación en los Juegos Olímpicos de París.

El tenista escocés Andy Murray, de 37 años, se verá obligado a perderse su último Wimbledon tras someterse a una operación en la médula espinal como consecuencia de la lesión sufrida en el ATP 500 de Queen's esta semana.

Según informó el diario británico The Telegraph, Murray estará seis semanas de baja, lo que también complica su posible participación en los Juegos Olímpicos que se celebrarán en París a partir del 26 de julio.

La lesión, que es la segunda importante del año para Murray después de romperse los ligamentos del tobillo en marzo, ha sido un golpe duro para el ex número uno del mundo.

El escocés se retiró durante su partido de segunda ronda en Queen's frente a Jordan Thompson debido a un problema en la espalda que le afectaba la pierna derecha.

Murray reveló que llevaba sufriendo este dolor desde la gira de canchas lentas, pero se intensificó antes del partido y expresó su deseo de no haber salido a la cancha.

A pesar de no haber fijado una fecha definitiva para su retiro, Murray ha dejado claro que no planea jugar más allá del verano europeo y que le gustaría retirarse en Wimbledon o en los Juegos Olímpicos, lo que considera como un escenario ideal.

El tenista ha sido dos veces campeón de Wimbledon, en 2013 y 2016, convirtiéndose en el primer británico en lograrlo desde Fred Perry en 1936. Además, ganó la medalla de oro para Gran Bretaña en individuales en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

La ausencia de Murray se suma a la de otros pesos pesados del tenis como Rafael Nadal, quien ya había anunciado su baja y Novak Djokovic, quien también ha tenido problemas físicos y recientemente fue sometido a cirugía por una rotura de meniscos.

La situación en Wimbledon se complica con estas bajas significativas, dando lugar a un torneo aún más impredecible y lleno de sorpresas.

En cuanto a los precios, el valor de la operación de Murray asciende a 140.000 euros, lo que refleja la importancia del cuidado médico en el mundo del tenis de élite.