La Inspección General de Justicia acepta la apelación de la AFA sobre la Asamblea que suspendió los descensos de la Primera División, elevando el conflicto con el gobierno de Javier Milei.

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El conflicto entre la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y el gobierno de Javier Milei se ha recrudecido, tras la reciente decisión de la Inspección General de Justicia (IGJ) de aceptar la apelación presentada por los abogados de la AFA. Este nuevo desarrollo lleva el caso a la Cámara Nacional de Apelaciones en lo Civil, donde se debatirá la legalidad de la Asamblea General Ordinaria del 17 de octubre, en la cual se votó de manera unánime la reelección anticipada de Claudio Chiqui Tapia y la suspensión de los descensos para la temporada 2024.

La IGJ, bajo la dirección de Daniel Roque Vítolo, ha permitido que la AFA interpusiera un recurso de amparo -aún sin remitir las actas oficiales desde la sede de Viamonte 1366-. Esta acción tiene un “efecto devolutivo”, lo que significa que hasta que la Cámara no tome una decisión diferente, se mantiene la suspensión de discusión sobre los puntos más controvertidos de la Asamblea, realizada en el predio Lionel Andrés Messi.

De esta manera, las decisiones sobre el tercer mandato de Tapia, la reubicación de la AFA a Ezeiza y la eliminación de los descensos quedan en un limbo legal.

El caso ahora recae en la Sala D de la Cámara Nacional de Apelaciones de la Capital Federal, compuesta por los jueces Gabriel Rolleri y Maximiliano Caia, y el secretario Daniel Pittalá. Esta situación ha generado inquietud sobre el tiempo que tardarán en resolver el tribunal, dado que deben cumplir con varios trámites burocráticos antes de estudiar el expediente.

El Departamento Legal de la AFA había impugnado la resolución de la IGJ que invalidó parte de la Asamblea, presentando un exhaustivo documento de 60 páginas.

En este, se demandó que se revoque la decisión del organismo dependiente del Ministerio de Justicia.


Además, el escrito dirige críticas hacia el presidente Milei, acusándolo de intentar forzar la integración de las Sociedades Anónimas Deportivas en el fútbol argentino, lo que contraviene los estatutos de la AFA.

El choque entre Milei y Tapia ha intensificado el enfrentamiento.

En recientes entrevistas, el mandatario argentino ha reiterado su postura de que la AFA ha estado involucrada en manejos cuestionables que afectan la calidad de la liga local.

Esta tensión se ha reflejado en decisiones de gobierno, como la publicación del decreto 939/24 que eliminó beneficios impositivos previamente concedidos a los clubes, lo que representa un duro golpe a la gestión de Tapia.

La administración de Milei busca ahora establecer un nuevo marco que considere más sostenible.

El ministro de Desregulación y Transformación del Estado, Federico Sturzenegger, ha mencionado que el régimen actual, que permite a los clubes no pagar sus obligaciones previsionales de manera estándar, generó un déficit fiscal significativo y deberá ser revisado.”Según algunas estimaciones, solo entre noviembre y abril, la AFA habría computado un déficit de más de 7.000 millones de pesos (cerca de 7 millones de euros) debido a esta situación.

Este enfrentamiento subraya una larga historia de tensiones entre la AFA y el gobierno argentino, en la que los intereses del fútbol, considerado uno de los pilares culturales del país, están en juego.

La resolución de esta situación tendrá un impacto significativo en el futuro del fútbol argentino y en la relación entre el organismo rector y el ejecutivo.