La Junta de Castilla y León lanza un programa de subvenciones que incentiva la creación de empresas y proyectos sostenibles, con un apoyo económico significativo para los emprendedores.

La Junta de Castilla y León ha puesto en marcha una ambiciosa línea de ayudas dirigida a fomentar el emprendimiento y la creación de empresas en la región.

Esta iniciativa, administrada a través del Instituto para la Competitividad Empresarial de Castilla y León (ICECYL), cuenta con un presupuesto que puede alcanzar hasta 9 millones de euros, destinados a apoyar a autónomos y pequeñas y medianas empresas (pymes) en la puesta en marcha de nuevas actividades empresariales.

Los proyectos que se presenten para obtener estas ayudas deben tener un valor de inversión que oscile entre 10.000 y 150.000 euros. La subvención otorgada será, como mínimo, del 35% de la inversión aprobada. Sin embargo, existe la posibilidad de incrementar este porcentaje en un 15% adicional si el proyecto implica la creación de empleo especializado, si está relacionado con iniciativas medioambientales, o si se ubica en áreas rurales o en zonas que cuenten con un Plan Territorial de Fomento, como sucede en la provincia de Soria.

Desde el año 2022 y hasta la fecha, se han gestionado más de 500 expedientes bajo esta línea de ayudas, con un importe total aprobado que supera los 24 millones de euros.

Este crecimiento en la actividad emprendedora es un reflejo del compromiso de la Junta por impulsar el desarrollo económico regional. En particular, el año 2024 se ha destacado como el período más fructífero, con 202 expedientes resueltos favorablemente, lo que representa un apoyo cercano a los 9 millones de euros.

La importancia de este tipo de ayudas radica en que no solo se busca fomentar el emprendimiento, sino también la sostenibilidad y la creación de empleos que beneficien a la comunidad.

En este contexto, los proyectos que se alinean con la estrategia RIS3, que promueve la investigación y la innovación, son especialmente valorados, lo que puede traducirse en un incremento adicional del 5% en la subvención.

Además, es relevante mencionar que la Junta ha observado un crecimiento del 24,26% en el número de expedientes gestionados en los últimos tres años, lo que demuestra un aumento en el interés por emprender en Castilla y León.

Este crecimiento también se ha visto reflejado en la cantidad de dinero destinado a subvenciones, que ha aumentado en casi 3 millones de euros en ese mismo período.

El plazo para presentar solicitudes para estas ayudas concluirá el 31 de diciembre de 2025, lo que ofrece a los emprendedores un margen considerable para desarrollar sus ideas y proyectos.

Con el apoyo financiero adecuado, la Junta de Castilla y León busca no solo fomentar la creación de empresas, sino también contribuir a la revitalización económica de la región, apoyando así un futuro más prometedor y sostenible.