El VII Festival ‘Danza en el Camino’ recorrerá nueve municipios del Camino de Santiago en Castilla y León en julio, con nuevas propuestas de danza contemporánea que buscan revitalizar el medio rural y promover la cultura patrimonial de la ruta jacobea.
El próximo mes de julio, la región de Castilla y León será escenario de una de las propuestas culturales más innovadoras y enriquecedoras del año: el VII Festival ‘Danza en el Camino’.
Esta iniciativa, organizada en colaboración entre la Junta de Castilla y León y el Ballet Contemporáneo de Burgos, tiene como principal objetivo dinamizar las zonas rurales a través de la danza contemporánea y fortalecer el diálogo entre el patrimonio histórico y las expresiones artísticas modernas.
Desde su primera edición en 2019, ‘Danza en el Camino’ ha ido ampliando su alcance, recorriendo múltiples localidades a lo largo del Camino de Santiago en España.
En esta séptima edición, el festival visitará nueve municipios en Castilla y León, así como en otras comunidades cercanas, en un recorrido que busca mostrar cómo el arte puede aportar vida y movimiento a territorios con gran valor cultural y patrimonial.
El evento se desarrollará entre los días 1 y 21 de julio, con un programa que incluye un total de 19 actuaciones en distintas localidades, muchas de ellas en espacios emblemáticos como iglesias, plazas y museos.
Entre los municipios castellanos y leoneses que acogerán las representaciones, destacan Burgos, León, Nájera, Santo Domingo de la Calzada, Castrojeriz, Villalcázar de Sirga, Mansilla de las Mulas, Cacabelos y Santiago de Compostela.
La programación combina obras de estreno absoluto con piezas clásicas, brindando una variedad que busca atraer a públicos diversos.
Una de las principales novedades de este año es la inclusión de dos propuestas invitadas que aportan distintas perspectivas a la danza contemporánea.
La bailarina y coreógrafa gallega Marcia Vázquez presentará ‘Onde pousa a humidade’, un espectáculo inspirado en la Costa de Morte, que explora la espera y la paciencia, conceptos muy ligados a la identidad gallega.
Por su parte, la Joven Compañía de Danza aportará ‘Jóvenes en Danza. Paso 2’, un acto que refleja las inquietudes y la energía de las nuevas generaciones mediante la pieza ‘Z*ELFIE’, que se mostrará en Cardeñajimeno.
Las obras principales, por su parte, incluyen ‘Kowaw’, un dúo de los coreógrafos taiwaneses Szu Shihmin y Hsin-Hsuan Yu, que aborda el miedo al envejecimiento y la muerte a través de movimientos sincronizados y acordes musicales tradicionales como el Niño de Elche.
También destaca ‘Adama’, creación del español Mario Bermúdez, que simboliza las raíces y la conexión con la tierra mediante una danza que simula la red de raíces que unen a los árboles en un bosque.
Por último, ‘Asceta’, de Chey Jurado, reflexiona sobre el retiro y la introspección, mostrando cómo la búsqueda de uno mismo puede convertirse en una trampa si se pierde de vista la realidad.
Las obras no solo buscan entretener, sino también provocar reflexiones profundas sobre la existencia, la historia y la cultura de la ruta jacobea.
Además de su valor artístico, ‘Danza en el Camino’ tiene un fuerte componente de promoción del turismo cultural en una de las rutas más famosas del mundo.
La presencia del festival en espacios patrimoniales de gran valor, como la Plaza de San Pedro en Jaca o la iglesia de Santa María la Blanca en Villalcázar, refuerza el compromiso de la región con la protección y difusión de su legado histórico.
El festival también cuenta con el apoyo de diversas instituciones culturales y gubernamentales, incluyendo el Centro Coreográfico Galego, las diputaciones de León y Burgos, el Museo Guggenheim Bilbao y los ayuntamientos locales.
La iniciativa busca no solo ofrecer un espectáculo de calidad, sino también fomentar el diálogo intercultural y el desarrollo económico en zonas que, tradicionalmente, han tenido menos oportunidades para mostrar su potencial cultural.
En cuanto a los aspectos logísticos, los precios de las entradas oscilan entre los 10 y los 15 euros, aproximadamente 9 a 13 euros en moneda europea, adaptados a las tarifas locales.
La organización ha destacado la importancia de facilitar el acceso a la cultura en zonas rurales, promoviendo una mayor participación de la comunidad local y de turistas interesados en la cultura jacobea.
El ‘Danza en el Camino’ continúa siendo una plataforma que une arte, historia y territorio, demostrando que la danza puede ser un potente motor de revitalización social y económica.
La edición de 2025 promete ser una de las más innovadoras y participativas, consolidando su lugar en el calendario cultural de Castilla y León y del conjunto del patrimonio europeo.